ENTERNECEDOR
Gretchen Byne, policía del departamento de Coral Springs (Florida), se ha ganado este apodo gracias a sus esfuerzos por salvaguardar la vida de los gatitos.
Todo comenzó en 2015. Gretchen, de 42 años, había salido a tomar un café en su descanso durante la guardia nocturna, cuando encontró a una gatita embarazada en el aparcamiento de un centro comercial. Estaba débil y famélica. Sabía que el animal corría peligro, y ese lugar, que se encontraba cerca de una vía muy transitada, no era muy seguro. Así que decidió llevarla a su casa, publicar su foto en redes sociales y cuidar de ella hasta encontrar un lugar de adopción para la felina.
A partir de entonces, comenzó a recibir decenas de mensajes de personas que habían rescatado gatos callejeros. "También comencé a prestar más atención y no dejaba de encontrarme gatos callejeros mientras patrullaba entre callejuelas y polígonos", relató Gretchen a la revista People. "Dejaba comida para ellos, me llevaba a los que podía conmigo, y los empecé a poner en adopción a través de Instagram".
Byne comenzó a hacerse popular. A cuantos más gatos ayudaba, más necesaria sentía una labor directa a acabar con esa situación: "Por cada gato que rescataba, había otros cinco o seis que necesitaban un hogar. Muchos de ellos habían sido abandonados porque los dueños no querían esterilizarlos o porque simplemente ya se habían cansado de ellos". Se sintió muy mal por ello y decidió que iba a hacer todo cuanto estuviera en su mano para cambiarlo.
Y así fue cómo se ganó el apodo de la "Policía Gato". Desde su primera adopción, ha ayudado a más de un centenar de gatos y cuenta con más de cincuenta mil seguidores en Instagram, donde publica todos sus rescates y pone a los felinos en adopción: "en el trabajo, en lugar de hacer el descanso para comer con mis compañeros, empleo ese tiempo para alimentar a los gatos. A veces se los llevo a los oficinistas, que tienen un trabajo muy estresante y tener compañía gatuna les ayuda".
Según cuenta Gretchen, cada vez más personas están interesadas en adoptar a un gatito callejero. Ella misma tiene ya cinco gatos en adopción. "Es difícil decir que no cuanto tienes un corazón blando".
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