SALUD MENTAL
Ibai se ha abierto emocionalmente frente a Xokas y los espectadores durante el nuevo episodio de Charlando Tranquilamente, donde ha confesado que 2015 fue la peor época de su vida, un año en el que empezó a triunfar, pero también a sufrir ataques de pánico.
Aunque Ibai y Xokas llevan ya varios años siendo buenos amigos y han pasado mucho tiempo juntos tanto en stream como fuera, la realidad es que la mayoría de las veces no suelen tener charlas muy profundas y personales frente a las cámaras. Por ello, Ibai ha decidido volver a traer al gallego a Charlando Tranquilamente, un podcast en el que ya estuvo como invitado hace casi tres años, cuando protagonizó su segundo episodio.
Y, una vez más, ambos han mostrado la relación tan cercana que tienen con el otro, algo que se ha reflejado en lo fácil que ha sido para ellos abrirse con el otro a la hora de compartir historias personales. Porque, pese a que estaban en stream, ninguno ha dudado en abrirse emocionalmente frente a los espectadores y revelar cuál ha sido el momento más duro de su vida. En ese momento, Ibai ha confesado que para él 2015 fue el peor año de su vida, porque, aunque trabajaba de algo que le gustaba y empezaba a ganar dinero con las redes sociales, empezó a sufrir ataques de pánico muy fuertes.
A raíz de esto, hubo un día en el que pensó que le estaba dando un infarto y que iba a morirse, porque dejó de sentir los brazos y las piernas, y comenzó a tener sudores fríos. Pero, pese a que los médicos le dijeron que estaba perfectamente, él siguió sufriendo ataques de pánico constantes, algo que en aquel momento no supo identificar porque apenas sabía nada de la salud mental. Fue una época tan dura que, por muchas cosas buenas que le pasaran, sus días se resumían en pensar "no quiero que el monstruo venga a verme".
Además, confiesa que incluso a día de hoy desconoce el motivo por el que empezó a sufrir estos ataques tan fuertes. Pero, por suerte, ahora ya ha aprendido a gestionar y controlar este problema con la ayuda de los profesionales, de forma que, aunque a veces sigue teniéndolos, son menos frecuentes y más débiles, por lo que no le cuesta tanto controlarlos.
Sin duda, la salud mental es un tema que sigue afectando a miles de personas. Pero, por suerte, la sociedad es cada vez más consciente de este problema y sabe identificarlo más fácilmente, algo que les permite actuar más rápidamente, algo que no ocurría hace unos años.