Henry Cavill también es gamer: "Me gusta escaparme con los videojuegos"
STREAMERS ENAMORADOS
El amor no tiene fecha de caducidad, y por eso aunque San Valentín ya queda un poco lejos (hasta para Sean Astin), Ibai decidió que el 16 de febrero aun podía ser un buen día para los enamorados. Es la fecha elegida para Ibai Dates, el programa que imita -hasta cierto punto- el programa de citas que se emite por televisión.
Decimos hasta cierto punto porque la cosa no era lo que muchos se esperaban. En vez de una historia cerrada, con giros de guión, impresiones de los protagonistas y esos toques de humor editado que tiene el formato original, la versión de Ibai fue mucho más improvisada. Más Twitch.
Con Illojuan y Reven haciendo de camareros, Werlyb con Cristinini de consejeros, y el resto de miembros distribuidos en el popular plató donde a veces surge el amor, los chicos hicieron de anfitriones para unas parejas que no parecían saber dónde se metían.
El montaje y retransmisión ha sido un pelín caótica, porque el lío de micros no dejaba oír las conversaciones individuales. Se nota la intención y cada uno de los streamers ha dejado clara su personalidad (por si alguno dudaba de lo rompecorazones que está hecho Werlyb), pero el caos nunca ha sido problema para Ibai y los suyos.
En Nochevieja y la presentación del nuevo squad ya tuvieron problemas técnicos y arrasaron en audiencias, algo que se ha repetido en la retransmisión de Ibai Dates. Estando en la cima de Twitch ahora mismo, sus followers le perdonan todo.
Hay que señalar que no han sido los primeros en esto de ligoteos youtuber. Team Heretics probó suerte en San Valentín con un consultorio que tenía como invitado ni más ni menos que a Alex Chiner, a quien Goorgo presentó como "el Maldini de los ligues".
Y no hay que olvidar que el primero en todo esto fue ElMillor, con un especial más humilde en medios y contenido, pero que por perfil del streamer llamó mucho la atención de la comunidad. El resumen de todos estos intentos parece apuntar en una sola dirección: encontrar el amor es mucho más complicado que encontrar el humor.