PRIMERA EXPULSIÓN
El streamer, especialista en rumores, tiene indicios de una 'mano negra' detrás de su misteriosa expulsión de la serie de moda.
Sin rodeos: Javi Oliveira ya no es participante de pleno derecho en London Eye. "Si estáis esperando que os dé un motivo de por qué ya no estoy que sepáis que no lo hay", dice el streamer sevillano anunciando él mismo que ya no forma parte de la ficción de GTA V. Eso sí, con matices.
"Me permiten seguir jugando pero no hacer stream", o lo que es lo mismo: echar unas partidas sin emitir, lo que para él es una pérdida de tiempo. Tras leer en su canal de YouTube las normas de convivencia que London envía a todos los participantes, asegura que no se ha saltado ninguna, pese a que tiene rencillas con otros con papel en el roleo.
"Cuando me he encontrado con alguien con el que he tenido roces, he sido profesional", asegura, pero tiene una una idea de por dónde viene todo el jaleo. "Lo que me han dicho es que hay personas que no quieren compartir servidorcon una persona del salseo", dice en relación a los vídeos que normalmente publica.
"Llamadlo censura, llamadlo como queráis", explica a sus espectadores, insistiendo en que en la reunión donde le han dado el toque le han dicho que no quieren que toque ciertos temas. "Sé que no tiene nada que ver con London, pero esto es así".
"Si un youtuber insulta a otro dentro de la serie, yo no puedo hablar de ello, porque según la organización el que crea la toxicidad es el que informa de esto, no el que insulta", explica visiblemente alterado por lo que, desde su punto de vista, es una incongruencia. "Si le encontráis la lógica me lo decís en la caja de los comentarios".
"Jacky ni siquiera ha dado la cara, ha mandado a dos administradores que los pobres no han podido explicarme las razones", dice Javi. "Se puede estar en London y tener causas judiciales pendientes, insultar a otros streamers o tener polémicas, pero un canal de salseo no se puede".
Sin decir nombres, sospecha de "quién puede estar detrás del escrache" que está viviendo ahora mismo. Sin ir más lejos, hace solo unos días aseguraba en 'Equipo de Investigación' que se había visto obligado a mudarse por el acoso de unos haters. Al parecer, se filtró su dirección y la asociaron a "un burdel de menores", acusación que suena más a locura de GTA V que a la vida fuera de las pantallas. Tristemente, la realidad supera a la ficción.