¿Qué ha pasado entre Sezar Blue y Cenando con Pablo? Una guerra entre foodies

Las redes sociales son el lugar perfecto para que un pequeño conflicto se convierta en una batalla campal. Dentro del sector de los creadores de contenido sobre crítica gastronómica, hay algunas figuras que han logrado una gran popularidad en España; entre ellas, están Sezar Blue y Cenando con Pablo. El primero de ellos ha llamado la atención de la comunidad tras publicar un post muy controvertido en el que critica las prácticas de algunos de sus compañeros (sin dar ningún nombre concreto), ya que, según Sezar, hay quienes publican contenido promocional sobre ciertos restaurantes de forma encubierta. Dado que no respeta este tipo de actitudes, que van en contra de las normas de Instagram y de la ley en España, Sezar ha decidido dejar de seguirlos a todos y poner este post de protesta.

Además, el influencer también ha publicado una serie de Stories en los que aclara por qué ha tomado esta decisión tan drástica. En ellos, señala que, debido a que no puede distinguir a quien hace contenido veraz y a quien falsea promociones, ha preferido dejar de seguir a todos los creadores y restaurantes, con el objetivo de que sus likes y comentarios nunca apoyen a un contenido promocional encubierto. No sabemos cuál ha sido en concreto el detonante que ha enfadado tanto a Sezar Blue, pero muchos se han sentido aludidos con sus palabras tras comprobar que los había dejado de seguir. Entre ellos, está otro conocido influencer, Cenando con Pablo.

La mayoría de las personas que siguen a Sezar Blue también siguen a Cenando con Pablo, ya que colaboraban muy a menudo y sus seguidores disfrutaban de la estrecha amistad que los unía. Es por eso que muchos fans se han sentido divididos ante este enfrentamiento tan directo de dos creadores que, hasta ahora, se mostraban de lo más cercanos en redes. Hace apenas unos días compartieron un vídeo cenando juntos en un avión, y han colaborado en numerosos proyectos antes de ese.

Las críticas no se han hecho esperar tanto hacia un crítico como hacia el otro, y muchos aficionados a este tipo de contenido se han planteado hasta qué punto sus ídolos son sinceros con ellos en sus posts. ¡Quién iba a pensar que se desataría una guerra como esta en un sector tan aparentemente pacífico como el de los foodies!