RIO BABEL 2024
18.000 personas abarrotaron la Caja Mágica en la segunda jornada del Río Babel a pesar del partido de España y del calor abrasador. Grandes conciertos de La Oreja de Van Gogh a 39 grados, La Pegatina a 35 grados y Amaral también por encima de los 30 grados para cerrar.
Las temperaturas subieron ayer en La Caja Mágica hasta rozar los 40 grados, con sensaciones térmicas superiores gracias a la enorme cantidad de público, poniendo de relieve el problema al que se enfrentan algunos festivales de música en Madrid donde el descanso de los vecinos choca de frente con el termómetro.
Este año el Río Babel termina a las 01:00 de la madrugada, demasiado pronto en mi opinión, haciendo que los conciertos empiecen a las 16:00 bajo un calor abrasador. Queriendo guardar fuerzas y huir un poco del sol llegamos al recinto a las 19:00 justo cuando España metía el primer gol en su partido de la Eurocopa que terminó ganando contra Alemania.
La Oreja de Van Gogh se tuvo que enfrentar a temperaturas abrasadoras y mientras una buena parte de los asistentes se agolpaban frente al escenario principal la otra mitad estaba refugiándose en cualquier pequeña sombra que encontraban.
El mítico grupo donostiarra ofrecieron un solido concierto lleno de temazos pop que el personal se sabía de memoria. Te gusten o no La Oreja de Van Gogh, seas de Amaia o de Leire, tienen un puñado de canciones que todos conocemos y que pusieron al público en pie.
Tuvieron una hora y cuarto en la que se tocaron 16 temazos en los que repasaron su carrera, dejándose fuera su primer disco. Aunque echáramos en falta Cuéntame al oído la gente se desgañito cantando Cuidate, Paris, Soledad, Rosas, Pop, Muñeca de trapo, La Playa y 20 de enero, con la que cerraron.
Son un grupo icónico y una de las bandas de pop más grandes de nuestro país pero sus conciertos no son tan potentes como los de otros grupos que tocaron después, Amaral y La Pegatina.
Tras La Oreja de Van Gogh fue el turno, en el escenario secundario, del siempre tropical y fiestero Carlos Sadness de poner a todo el mundo a bailar. Su música llena de energía y de guitarras coreables está diseñada perfectamente tanto para un festival de verano como para una fiesta en la piscina.
Hablando de fiestas la que monta siempre La Pegatina es sin duda la más grande que puedes ver en directo por parte de un grupo español. Este numeroso grupo, que ya está empezando a alcanzar estatus de legendario, ha mezclado el concepto de las verbenas de pueblo, con la rumba catalana, cel ska, el rock de estadio y Manu Chao para crear un espectáculo en el que ponen al público a bailar durante una hora sin parar.
Canciones fiesteras icónicas como El Gat Rumberu, Lloverá y yo veré y la imprescindible Maricarmen se mezclan con trozos de Piratas del Caribe, Two Door Cinema Club, Vivir Mi Vida o La guitarra de Los Auténticos Decadentes.
Siempre es un placer ver a este genial grupo al que llevo siguiendo desde que dieron su primer concierto en Madrid hace más de 15 años y fueron la explosión de alegría y fiesta perfecta que necesitaba el festival.
Tras el subidón de La Pegatina la organización había programado muy acertadamente a El Mato A Un Policía Motorizado en el segundo escenario.
El de los argentinos era sin duda el concierto que más ganas tenía de ver en todo el día y me enamoraron. Su rock indie lleno de letras intensas y melodías que recuerdan al dream pop es maravilloso.
Temazos como Mas o menos bien, El tesoro, El Mundo Extraño, Diamante roto o Medalla de oro sonaron preciosas y me dejaron con las ganas de verles en un concierto en sala donde creo que su música pueda ganar muchos más puntos.
Llegamos después al cierre de fiesta con Amaral, que tras lo que vivido el año pasado en el Sonorama Ribera habian perdido la capacidad de sorprenderme, pero que siguen teniendo un directo poderoso con una Eva maravillosa y una colección de temazos incontestable.
La fuerza de Amaral la vemos primero en su capacidad de convocatoria, junto a La Oreja de Van Gogh y La Pegatina han conseguido colgar el cartel de no hay billetes atrayendo a 18.000 personas.
Después la vemos en una banda perfectamente engrasada con un sonido pop rock grandioso en el que las canciones crecen hasta sonar mucho más épicas de lo que realmente son cuando te las pones en casa.
Por último y más importante la fuerza de este grupo está en la propia Eva Amaral cuya voz, presencia en el escenario y actitud son apabullantes.
Podría hacer un listado de las canciones que se tocaron pero es que no tiene sentido ya que son todas temazos desde la emotiva Salir corriendo al último single Rompehielos pasando por las más icónicas Revolución, Marta, Sebas, Guille y los demás o El universo sobre mi.
Una segunda jornada de Río Babel en la que ganó la buena música, sonaron muchos himnos atemporales de nuestra historia y el sol abrasador casi derrite a gran parte de los asistentes. Hay que empezar a diseñar festivales con más sombras, retrasar los horarios de los mismos o buscar lugares alejados de la gente donde no molestes a los vecinos para poder esquivar las horas de mayor calor.