ENTREVISTA
El cantante manchego Dani Fernández cerro por todo lo alto la gira Vibra Mahou con un concierto sold out en La Riviera. "Se acaba una etapa. Nunca pensábamos en el final y lo que eso conlleva", ha explicado en una entrevista.
Con las entradas agotadas en todas las paradas de su gira, y en ésta última apenas minutos después de ponerse a la venta, Dani Fernández no solo cerró anoche sus actuaciones en Madrid sino "un año de ensueño" que ahora culmina con sus dos mayores desafíos, ser padre y terminar su tercer disco, dos retos para los que espera poner "todas sus energías".
"Se acaba una etapa. Nunca pensábamos en el final y lo que eso conlleva (...) Aunque ahora mismo estamos saturados por todos los conciertos que llevamos detrás, luego lo echas de menos. Estoy muy emocionado y nervioso por lo que va a pasar", asegura en una entrevista con Efe el cantante y compositor de 31 años.
Este último concierto en la sala La Riviera cierra un año que Dani Fernández ha coronado con un Premio Ondas al Fenómeno Musical del Año y el galardón a ‘Mejor artista’ en Los40 Music Awards 2022, entre otros. A pesar de ello, muestra naturalidad y mantiene los pies en el suelo sabedor de que "va a ser muy difícil repetir las mismas buenas sensaciones".
El evidente éxito de la "Gira Plan Fatal" hace gozar a la banda de "una buena salud profesional. Pero sabemos que no siempre va a ser así. Tenemos que estar preparados porque la música te juega muchas malas pasadas y yo lo sé de primera mano".
El músico no duda en reconocer que hay momentos en los que "hay que vivir en la sombra". Él lo vivió cuando al separarse de la 'boyband' Auryn, con la que empezó en la industria, tuvo que buscar de nuevo su esencia y volver a empezar.
"Ha sido el paso más difícil de mi vida. Dejas de importar. Se apagan las luces, los viajes y muchas cosas que no sabes si van a volver (...) Si algo me ha dado la experiencia en la música es conocer el fracaso. Mi vida ha tenido muchos tonteos con el fracaso y mi cabeza está en prepararse para uno nuevo", asegura.
A día de hoy, lejos queda la palabra fracaso para un Dani Fernández que con su directo y su cercanía con el público ha conseguido cerrar su gira de la mano de Vibra Mahou con un éxito rotundo: "Los artistas tenemos miedo al abandono y nosotros nos encontramos con gente que repite en nuestros conciertos. Ha sido un año de ensueño".
Ha puesto el punto y aparte en la Sala Riviera ante cerca de 2.500 personas y en un concierto en el que incluso salió del escenario para cantar a sus fans a capela subido a la barra del bar un adelanto de lo que será su tercer disco.
"Tengo todas mis energías tanto en ser padre como en hacer un discazo. Quiero hacer el mejor disco de mi carrera", sentencia.
El artista se enfrenta ahora a uno de los retos más importantes de su vida: ser padre de una niña que se llamará Belice, por el título que lleva la canción del grupo Love of Lesbian, un tema muy especial para él y su pareja Yarea.
"Me da miedo, por supuesto es una responsabiliad increíble pero si mis padres me sacaron adelante a mi y a mi hermana con 25 años, siendo una familia super obrera... creo que esto, por supuesto, lo vamos a sacar", añade.
En el horizonte de Dani Fernandez ahora toca descansar para seguir componiendo un álbum del que ya tiene preparadas siete canciones: "Necesitaba parar para que fuera compatible hacer un tercer disco, que ya tengo un poco encaminado, y para estar con mi hija Belice".