PRECONCURSO DE ACREEDORES
La entrada en preconcurso de acreedores de Wegow, una de las principales plataformas de venta de entradas en nuestro país, ha generado un terremoto en la industria musical. Lejos del alarmismo analizo la sitaución de forma sosegada poniendo el foco en las bandas afectadas, lo que podemos hacer para ayudarlas y los problemas estructurales de una industria musical precaria.
Estos días de mayo se ha producido una noticia que ha hecho temblar los cimientos de la industria musical en nuestro país, provocando todo tipo de reacciones. La plataforma española de venta de entradas Wegow atraviesa una grave crisis financiera tras anunciar su entrada en preconcurso de acreedores el 21 de mayo de 2025. Esta medida busca reestructurar su actividad y evitar la quiebra, pero ha generado una gran preocupación en el sector musical español, con numerosas bandas, artistas y festivales temiendo no poder recuperar su dinero.
Existen muchas formas de afrontar esta noticia y centrar el relato en el origen socioeconómico de los fundadores de Wegow, en si son niños de papa o en como se fundo la empresa no me parece el más acertado. Es sólo una de las patas de todo este embrollo y quizás una de las menos importantes en este momento.
Mucho más relevante es saber qué va a pasar con las bandas, los festivales y las promotoras afectadas, o analizar la precaria situación estructural de la industria musical en nuestro país. El colapso de Wegow no es un hecho aislado: es un síntoma más de lo mal que están muchas cosas.
Las preguntas que realmente importan son otras: ¿las bandas y las promotoras van a cobrar? ¿Existen garantías legales? ¿Qué ha sucedido para que Wegow haya llegado a esta situación? ¿Desde cuándo operaba al límite, con graves problemas de liquidez? ¿Qué nivel de deuda acumula? ¿Hay alguna esperanza, al menos, de recuperar parte del dinero?
Estas cuestiones exigen un análisis profundo y sosegado, y por ahora no tienen una respuesta clara. Lo que sí sabemos con certeza es que muchas bandas ya han sido afectadas, y que existen formas concretas de apoyarlas en estos momentos. Grupos como Bombai, Veintiuno, La M.O.D.A., Yoli Saa o Inazio han denunciado pérdidas significativas. Se han visto obligados a reorganizar sus giras y a buscar nuevas plataformas de venta para minimizar el impacto.
En redes sociales, muchas personas están proponiendo ideas para ayudar a los artistas. La más evidente es comprar su música y su merchandising: muchos ofrecen productos interesantes, y con esa compra se garantiza que el dinero va directamente al artista.
Otra forma de apoyo es asistir a sus conciertos. Es importante entrar en las páginas oficiales de tus artistas favoritos, comprobar si han sido afectados y adquirir entradas a través de la nueva ticketera oficial que hayan anunciado.
"Nosotros vamos a seguir con nuestra gira con normalidad, todas las entradas son válidas, y ya veremos cómo lo hacemos. Hemos recibido muchísimos gestos de apoyo y nos sentimos muy afortunados del cariño que sentimos de nuestra escena", escribieron Veintiuno en un comunicado en sus redes sociales.
"Están siendo unos momentos complicados. La que era nuestra ticketera para esta gira ha entrado en preconcurso de acreedores, lo que en resumen quiere decir que muy probablemente no cobraremos ni los bolos que ya hemos dado, ni los que quedan por dar. Esto implica asumir todos los pagos: equipo, salas, coches, dietas, gasolina y un largo etcétera", señalaba Yoli Saa.
"Esto significa que ellos tienen en su poder el dinero de las entradas de nuestra gira y de un montón de bandas, salas, eventos y festivales. Y Wegow nos dice que, a día de hoy, no nos lo da", sentenciaban por su parte La M.O.D.A.
Estos son solo tres comunicados, tres casos concretos entre muchos otros que circulan por redes sociales. Existen publicaciones recopilatorias con listas de artistas afectados por esta situación como esta.
Ahora solo nos queda dar todo el apoyo posible a los artistas y bandas, por pequeño que sea, y esperar a ver cómo evolucionan los acontecimientos. Al mismo tiempo, es urgente reflexionar sobre qué se puede hacer para evitar que situaciones así se repitan, y para que dedicarse a la música en nuestro país no sea una actividad tan precaria, arriesgada y difícil de sostener.
Desde una perspectiva política e institucional, sería necesario tomar medidas concretas para potenciar, proteger y defender la música como parte esencial de nuestra cultura. En mi opinión esto incluiría controlar la especulación generada por el exceso de festivales, proteger el circuito de salas de conciertos, fomentar la existencia de locales de ensayo municipales y apoyar concursos de bandas emergentes entre otras muchas medidas. Pero, sobre todo, resulta imprescindible impulsar una legislación específica que regule la industria musical y proteja los derechos de los artistas, una protección legal que hoy, lamentablemente, no existe.