GUTS World Tour
La joven estrella del pop de 21 años deslumbró a sus fans madrileños en el WiZink Center con su gira GUTS World Tour en un concierto que será recordado por todos. Olivia ha demostrado por qué es una de las artistas más influyentes de su generación.
Olivia Rodrigo continúa su ascenso con la gira GUTS World Tour que ya ha visitado más de 50 ciudades. Con solo dos álbumes, Sour y Guts, ha redefinido el panorama del pop contemporáneo conquistando a miles de fans.
La gira, que arrancó en febrero de 2024, ha llevado a Olivia por todo el mundo, en una serie de conciertos que han sido un fenómeno en cada ciudad que visita. Tras el éxito en Barcelona, el jueves 20 de junio fue el turno de Madrid.
Desde el momento en que las luces se apagaron y Olivia Rodrigo apareció en el escenario del WiZink Center, quedó claro que esta no sería una simple noche. Acompañada por los gritos ensordecedores de sus fans, la artista californiana comenzó su espectáculo con Bad idea right?, enloqueciendo inmediatamente a sus miles de seguidores que abarrotaban el recinto.
El WiZink Center, con su capacidad para albergar a más de 17.000 personas, estaba completamente lleno, reflejando el fenómeno global en el que se ha convertido Olivia Rodrigo. Y esa noche en Madrid, ella entregó todo y más.
El concierto fue una montaña rusa que llevó a sus fans a viajar por todas sus emociones. Olivia mezcló los éxitos de su álbum debut Sour con los nuevos temas de su último lanzamiento Guts.
Canciones como Drivers License y Traitor, con Olivia sentada al piano, sumergieron al público en sus conmovedoras letras, que coreaban con una intensidad que llenaba el aire de una palpable emoción compartida.
Por otro lado, temas como Brutal y All-American Bitch desataron la energía de los asistentes, con Olivia saltando y corriendo por el escenario, acompañada por una banda compuesta completamente por mujeres. La potencia de estos temas mostró el lado más rockero de la artista, capaz de conquistar al público con una actitud y dinamismo arrolladores.
Uno de los momentos más destacados de la noche fue cuando Olivia se sentó en el borde del escenario para interpretar Favorite Crime. La cercanía con el público creó un ambiente íntimo en medio de la multitud. Los seguidores, muchos de ellos adolescentes, se veían visiblemente emocionados, algunos con lágrimas en los ojos, cantando junto a Olivia.
Además, la escenografía del concierto añadió una capa extra de magia. Durante la interpretación de Logical, Olivia se elevó sobre el escenario montada en una luna, recorriendo todo el recinto y dejando al público boquiabierto.
El concierto terminó por todo lo alto, los asistentes se levantaron de su asiento para disfrutar de la última canción, Get it him back, que dejó a todo el mundo con ganas de más.
A lo largo de la noche, las comparaciones con Taylor Swift, una de las referentes de Olivia, fueron inevitables. Sin embargo, la joven cantante ha demostrado tener un estilo propio y una capacidad única para conectar con su audiencia.
Sus dos álbumes han cimentado su lugar en la industria musical con una propuesta auténtica. A medida que continúa su gira mundial, queda claro que estamos presenciando el ascenso de una artista que no solo brilla en el presente, sino que también tiene un futuro prometedor.
Más allá de la música, Olivia también demuestra su lado más solidario. Parte de los ingresos de su gira en Europa se destinan a la organización Women Against Violence Europe (WAVE), demostrando su compromiso con la lucha contra la violencia de género.
Al salir del recinto, el público continuaba cantando, alargando el concierto más allá de las puertas el WiZink center en un intento de que la noche nunca acabase.