EUROVISIVO
Muchos fans de Eurovisión españoles se han quejado de que los votantes de su país tengan una percepción muy limitada de lo que se puede considerar eurovisivo o digno de Eurovisión. Estas quejas llegan después de que muchas personas opinen que la propuesta de Blanca Paloma no encaja en el festival.
Durante los últimos años, y con el fenómeno fan que ha ido surgiendo en torno al festival de Eurovisión, cada vez son más los que creen tener el criterio para discernir entre aquellas actuaciones dignas de este certamen y las que no lo son. Tanto se ha tipificado a los artistas que se suelen presentar al festival, que ya hay quien habla de la necesidad de escoger una propuesta "eurovisiva" para tratar de conseguir el mejor puesto posible en los rankings finales. Hace apenas unas semanas que Blanca Paloma fue elegida para representar a España en Eurovisión 2023, y no son pocos los que han tratado de hundir su propuesta diciendo que Europa "no la va a entender" o que no es "lo suficientemente eurovisiva". Algunos fans clásicos del formato se han manifestado en contra de estas ideas preconcebidas.
Al hacer un repaso a las propuestas ganadoras de los últimos años, lo cierto es que muchas de ellas no tienen nada que ver con el tipo de candidaturas que solemos imaginar dentro de Eurovisión: grupos de rock, baladas minimalistas, canciones reivindicativas en idiomas que ni siquiera entendemos… Todas ellas han tenido un factor común: la genuinidad. Ser capaz de escoger una propuesta con un carácter artístico y que sepa llegar al alma de los espectadores es lo más importante para destacar en Eurovisión. O, al menos, es mucho más importante que la escenografía explosiva, los vestidazos y el show puro y duro.
Al margen de que la propuesta de Blanca Paloma guste o no, lo importante es que es una actuación con la que muchos se han sentido representados. Ahora, lo único que queda es ensayar al máximo, darlo todo en el festival y mostrar al mundo lo muchísimo que el talento español puede ofrecer.