ENTREVISTA

Samantha Hudson y Zahara se alían en Liturgia: "Si la Virgen bajara, sería nuestra fan"

La esperada y provocadora colaboración entre Samantha Hudson y Zahara ya esta aquí. Las dos artistas hablan en esta entrevista sobre el uso de iconografía católica: "No somos las primeras ni seremos las últimas en hacerlo".

Samantha Hudson y ZaharaEFE/ Adri Cuerdo/Subterfuge

En el videoclip de Liturgia la sacerdotisa Zahara ayuda a Samantha Hudson entre tocas y crucifijos a bañarse y a expeler demonios, internos y externos, en un canto por la libertad creativa y en contra de los moralismos.

"Tiene una parte de crítica a las detractoras de pasárselo bien y a que tener una opinión personal que se salga de la norma sea visto como una provocación. Es un cambio de posición en cuanto a que no hay escándalo sin una sociedad que se escandalice", explica Hudson a EFE, tras subrayar que no ha buscado la "ofensa": "Es más, si la virgen María bajase a la tierra, estoy segura de que sería nuestra fan y que vendría a vernos".

Monjas en ropa interior frotan el cuerpo de esta artista sumergido en un líquido lechoso, en un videoclip de cuidada factura dirigido por Fran Granada, que emplea elementos de la iconografía católica que la autora se siente plenamente legitimada a utilizar.

"No somos las primeras ni seremos las últimas en hacerlo, pero es que es la iconografía con la que nos hemos criado porque hay una cultura católica muy latente. Yo misma fui muy religiosa en mi infancia; si alguien quiere verlo como blasfemia, bienvenido sea, pero es parte de nuestro derecho a expresarnos libremente", defiende.

Ambas artistas de hecho han sido objeto de ataques en el pasado por apelar a este tipo de imágenes en sus discursos, como Zahara, cuando se vistió de virgen en la portada de su disco 'Puta' (2021), o la propia Samantha Hudson, excomulgada desde que a los 15 años publicó como un trabajo de clase su primer tema, el viralizado Maricón.

De aquella época recuerda "la ilusión y las ganas de crear", así como "la inconsciencia de las vicisitudes" que llegarían después, en "encuentros creativos más estandarizados, cuando empezó a sentir "el descontrol y el autoboicot".

"A mí la inseguridad me ha venido muchos años después", confiesa la artista. De eso habla también en Liturgia, "de los muchos hándicaps que te encuentras cuando intentas desarrollar una propuesta artística, no solo exteriores como una industria vampírica y caníbal, sino también otros internos, como pensar que no te corresponde la posición que habitas actualmente".

En ese proceso de construcción personal, en el videoclip aparecen un payaso, "como símbolo de una hiperrealidad por sus gestos exagerados y de la búsqueda consciente de identidad por el uso de un maquillaje", y también un "transformer", un guiño "con sorna" para todos aquellos que utilizan ese apelativo para "las travestis".

"En toda mi propuesta hay una defensa de la transexualidad porque es imposible desligarme de mi identidad de género. Lo he usado desde que tengo uso de conciencia para expresar mi género y metamorfosearme. Siempre digo que, para mí, mi identidad drag es Iván González y que Samantha Hudson nació en 2015, que es el parto que más me interesa", declara.

Revela que fue "en un arrebato en el baño" cuando escribió este "homenaje a lo absurdo y lo contradictorio del proceso creativo", el cual, en lo musical, llega envuelto en sonidos maquineros y momentos de trance psicológico de la mano de DJ Fynal Boss (antiguamente conocido como LVL1).

Ya con "una demo decente" se le vino a la cabeza la posibilidad de trabajar con Zahara, con la que había coincidido en su "no documental" 'Esto no es una canción política'. Juntas, pensó, podrían invocar el concepto de 'rave' como "un espacio de diversión sin tapujos".

"La Paz sea contigo / Tu paz lleves lejos / Quédate en tu púlpito / Con los ángeles del miedo / A mí no te acerques / Y por mí no reces / No soy un alma en pena / Atrapada en tus redes", recita la artista jienense en un 'spoken word' que Hudson ve como "una homilía, como un trance que embruja al oyente".

Destaca la "conexión orgánica" que se ha establecido entre ambas, "como si fuésemos Beyonce y Shakira", añade entre risas, y afirma que con este tema abre una "nueva etapa musical" en su carrera, tras la publicación en 2023 de su último EP, 'Aove'.

"Llevo casi un año trabajando en un nuevo proyecto; no sé si llamarlo álbum o EP pero es el inicio de una nueva etapa con singles y, cuando lo tenga bien hilado, me lanzaré a piscina", anticipa ilusionada, mientras ultima asimismo una gira que, por ejemplo, el próximo 5 de octubre la llevará a Barcelona "con un 'show' muy especial".