¿Cómo puedes tener una vida normal cuando has visto un campo de refugiados sirios?

Idomeni es el campo más famoso, por ser el más grande, pero en toda Grecia hay 25 más. Como en el de Katsika, no sólo hay refugiados sirios, sino también afganos, iraquies y kurdos. Unos huyen de al-Ásad y su guerra, otros del genocidio de Daesh. Pero todos tienen algo en común: creen que Europa les tenderá la mano.

"¿Esto es Europa, papá? ¿Esto es por lo que tanto hemos estado viajando?", recuerda que una niña siria le dijo a su padre.

Nüll es el testigo de aquel horror, sus ojos han visto fotos de los parientes de los refugiados y ahora conoce sus historias: matanzas, violaciones y torturas.

A su regreso de Katsika, Nüll pasó por una durísima etapa en la que tuvo que decidir cómo digerir todo lo que había vivido. Ahora lo tiene claro: no lo olvidará jamás, será su testigo en Occidente.