@BECARIA_
Becaria entrevista a un hipocondríaco frente al coronavirus.
Nos citamos en una terraza con las mesas muy separadas. Guillermo (40), que prefiere ocultar su identidad real, lleva una mascarilla FFP3 con un enganche de sujeción trasera que ejerce mayor presión en su rostro, de modo que no permita la filtración de aire a través de ninguna hendidura. Guillermo se reconoce como coronófobo; dícese del hipocondríaco frente al coronavirus, al covid persistente y sus secuelas, y vive con temor a morir por la infección de este virus que nos lleva mareando dos años. El entrevistado solamente se quita la mascarilla para tomar el café a sorbos, y se la recoloca mientras lo saborea. Al terminar nuestro osado encuentro, se empeñó en pagar él ambas consumiciones levantando el brazo al camarero para evitar acceder al local hostelero: "Me parece un riesgo innecesario", afirmó con rotundidad.
¿Cuál es tu gestión diaria frente al Covid-19?
Mascarilla FFP3 en todo momento, tengo la suerte de trabajar en un sitio donde no me relaciono con gente y aun así la llevo puesta, y ventilo continuamente por si acaso. Cuando entra alguien, me la ciño más para que no haya filtraciones. Evito lugares con aglomeraciones, evito interiores en bares y restaurantes, y estoy pendiente de la dosis de refuerzo. Cuando considero que tengo una exposición de riesgo como ir al centro comercial o al dentista, utilizo enjuagues de colutorio, aunque la efectividad no está demostrada, y también me he hecho varios test de antígenos estas navidades por cerciorarme de que estoy sano.
¿Cómo es tu vida social?
No tengo —se desengancha la mascarilla para un sorbo de café y se la vuelve a colocar—. Bueno, restringida al máximo. Hoy, ya que se trataba de un exterior, me he visto con la valentía porque llevaba desde antes de Navidad sin tomar nada.
¿Qué medios utilizas para informarte del Covid-19 y la pandemia?
Expertos, virólogos, epidemiólogos, médicos, físicos en mecánica de fluidos, publicaciones científicas, papers, preprints, revistas médicas, y no hay mucho más.
¿Qué estudia un físico en mecánica de fluidos?
Aplicado al Covid; aerosoles, fundamentalmente, su comportamiento y las medidas preventivas como la ventilación, el uso de mascarillas, sus tipos y ajustes, los medidores de dióxido de carbono o los filtros HEPA.
Te tienen que faltar horas en el día para informarte. ¿Qué echas de menos de la prepandemia?
Lo típico, salir a tomar algo, cerrar un bar, ir a conciertos, al cine; hacer vida social y cultural, en definitiva.
¿Cuál es tu nivel de miedo a contagiarte?
En una escala de 0 a 10, más bien tirando a alto —no concreta el valor—, aunque creo que nos vamos a contagiar y recontagiar todos.
Pero si continúas con tantas medidas profilácticas y moderadamente aislado de la vida social, va a ser complicado que te infectes, ¿no?
Es más difícil tomando las medidas, pero imposible no es. Yo creo que el contagio inicial lo pasé, el de Wuhan, y una reinfección tengo mis dudas, y ahora ya vienen por ahí las variantes de Ómicron pisando fuerte, así que ya veremos.
¿Tienes alguna patología que te haga estar tan alerta y preocupado?
No, pero me acerco a la edad de riesgo, que está en 50-60, aunque estoy en la cuarentena, pero siento y está demostrado que el peligro acecha en cualquier edad.
¿No crees que has llegado a un punto de “infoxicación” por leer tanto sobre el virus, los contagios y la enfermedad?
Sí, es una avalancha constante de información sobre el virus, pero es el precio de querer estar bien informado.
¿Crees que habría que obligar a los negacionistas, plandemias y demás estirpe conspiracionista a vacunarse?
Sí, primero por su propio bien. Las UCI están llenas de negacionistas y plandemias, y seis de cada diez, menores de 50, a los que el virus ataca y deja como si fueran ancianos de 80, aun estando completamente sanos y sin comorbilidades; les administran tanta medicación en ellas que en su vida habrían tomado toda ella junta. Que dejen de tocar los cojones y se vacunen. Y también debería ser obligatorio porque se generan menos variantes, y la vacuna debe llegar a todas partes.
Se han detectado en Murcia varios casos de antivacunas que han ido a los centros de vacunación para fichar y constar como vacunados, y se han marchado antes del pinchazo.
Son una peste social, pero de arrepentidos está lleno el Infierno.
Ahí sí que está la cosa que arde. ¿Qué me puedes contar de tu vida sexual?
No existe, salvo la que practico conmigo mismo desde 2020. No tengo sexo desde el inicio de la pandemia por evitar el contagio. Tengo tanto miedo a contagiarme como de contagiar a otras personas, me abstengo hasta que todo pase, quiero estar tranquilo.
Eso es que no te apetecerá mucho follar.
Puede... —se queda pensativo—. Es más importante la salud que el placer. Si ya teníamos las ETS para las que hay protección y aun así te puedes contagiar, con esto es como una ruleta rusa. El Covid-19 es como un VIH aéreo.
Eres consciente de que tomas precauciones en situaciones donde el riesgo de contagio es prácticamente cero.
El riesgo cero no existe.
Está claro que si todo el mundo fuese como tú, ya se habría terminado la pandemia. ¿Y mentalmente cómo te sientes?
Regular, pero con optimismo en la ciencia, que no en la sociedad.