El momento en que una bomba de palomitas de maíz explota en mitad de una calle de China
ENTREVISTAMOS A MANUEL GIL, DIRECTOR DE LA FERIA DEL LIBRO DE MADRID
Todo comenzó en marzo. Un trágico accidente acabó con la vida de un niño de cuatro años cuando le cayó un árbol encima en el parque madrileño del Retiro.
Luego, justo un día antes de la inauguración de la Feria del Libro, el Ayuntamiento de Madrid estableció una alerta roja debido al fuerte temporal que se avecinaba. La AEMET anunciaba fuertes vientos dentro del recito ajardinado.
Libreros y editoriales tenían las casetas a medio montar y apenas pudieron acceder al parque. Era jueves, llegó el viernes y nada. Ni siquiera el clásico paseillo de los representantes de Casa Real -tenía previsto acudir la Infanta Elena de Borbón- pudo celebrarse.
Comenzó entonces a correrse el rumor. "La Feria se irá del Retiro". "Quizás sea este el último año". "Si nos envían a IFEMA la Feria está muerta".
“La Feria va a continuar en el Retiro. Forma parte de la identidad de Madrid. Madrid, su Retiro y su Feria del Libro. Eso sí, siempre haciendo todo lo posible para que haya unos proyectos de sostenibilidad, como los que ha habido este año, en los que no se ponga en peligro ni una pizquita este parque histórico”, confirmaba la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, en el ecuador del evento.
Sonaba, como digo, a ratificación de entrenador de fútbol con el equipo como colista. Manuel Gil, en esta entrevista, lo descarta. La Feria seguirá en el Retiro. Hoy, puede que llueva, cosa que preocupa aún más a los libreros.
"En absoluto. Rotundamente, no. La alcaldesa nos garantizó la voluntad suya y de su equipo en que la Feria no se mueva del Retiro, donde ha estado en los últimos 50 años", explica Manuel Gil, director de la Feria del Libro de Madrid en esta entrevista para Tribus Ocultas.
"Es cierto que ha habido rumores por lo accidentado del inicio de la Feria. Otra cosa es que necesitamos pactar con el Ayuntamiento, cuando termine esta edición, definir un protocolo de cómo estamos en el Retiro", finaliza Gil.
El máximo responsable de la Feria también avanza por qué no cuajó el proyecto de una carpa digital en pleno Retiro para incorporar a los agentes del sector del libro electrónico.