IBAIRECORD
El vasco es el primer streamer en ganar el galardón dos veces seguidas, un reconocimiento a un año todavía más loco que 2020.
2020 terminó en la vida de Ibai Llanos como "el mejor año que recuerdo y que podría haber tenido". Había abandonado los esports para hacerse creador de contenido con sus tres mejores amigos, en una mansión que le vino de perlas para el inesperado confinamiento, y que le catapultó a mejor streamer del planeta.
Aunque sus números no paraban de crecer, parecía difícil repetir la hazaña en 2021, pero los Esports Awards han tenido que rendirse a lo evidente: ni en YouTube, ni en Twitch ni en Facebook Gaming ha habido nadie a la altura del vasco.
"La categoría Streamer del Año reconoce el trabajo de creadores que han construido y mantenido una audiencia de seguidores que consistentemente se sienten entretenidos", rezan las normas de la organización, en lo que parece una descripción del día a día de Ibai. En el otro criterio para ser aspirante sencillamente no tiene rival: "Innova en el área del streaming con nuevas ideas, avances tecnológicos o calidad en general".
La madrugada del sábado al domingo era el momento en el que la ceremonia iba a tener lugar, un mal momento para la audiencia pero que igualmente congregó a decenas de miles de aficionados españoles para celebrar con él la buena noticia. En el evento salió un vídeo pregrabado, antes de saber que él era el elegido, nada que ver con lo que sucedió en su directo en Twitch.
"Ya lo tenía claro, pero el ganador es... EBAI", dijo el presentador en el momento de anunciar el nombre. Una pronunciación extraña que hizo al vasco plantearse por un momento si él sería el vencedor. "¿Ha dicho Ibai? ¿Sí? ¡Lo he ganao yo! ¡Lo he ganao yo!", exclamaba al asegurarse junto a Ander, su compañero y amigo íntimo.
TheGrefg, el otro nominado español, reconoció que los méritos de su rival eran suficientes para llevarse el galardón, y pese a quedarse con la cara larga (ya que también acumula grandes éxitos en lo que va de 2021) su felicitación parece de lo más sincera.
Los tímidos aplausos del auditorio donde presencialmente se celebraba la gala no tienen nada que ver con el exitazo y celebración que previsiblemente se pegarán en redes los fans y por supuesto el ganador. Un referente ya no solo en el mundillo, sino también en el mundo.