El aterrador momento en que un estudiante de piloto abre la puerta de un avión en el aire
Los dibujos más feos pueden ser los más artísticos
Las tendencias van y vienen, y los tatuajes son una clara prueba de ello. Hoy en día puede ser difícil encontrar a alguien joven que no lleve ningún tatuaje en el cuerpo.
El arte de tatuar es complejo y requiere profesionalidad, técnica y talento. Desde que surgió este fenómeno ha evolucionado a pasos agigantados. En cuanto a tendencias, las modas de los tatuajes han ido desde los triviales a los dragones o los retratos de seres queridos. Últimamente también ha retumbado en nuestra retina ver a más de algún adolescente con tatuajes del signo de infinito, mini corazones en las muñecas, referencias al mar como palmeras, anclas, o el famoso triángulo de las reliquias de la muerte.
Ante esto, llega Helena Fernandes, una tatuadora brasileña que no ha pasado desapercibida en las redes sociales. La propuesta de esta tatuadora es sencilla, un trabajo original. Conocida ya en Internet como "la peor tatuadora del mundo", esta joven de 23 años y apasionada del tatuaje tiene un hándicap: no sabe dibujar.
Sin embargo, algo que en principio supondría un problema se ha convertido en su seña de identidad, un elemento que hace que su obra sea original, diferente. Hacer del feísmo su firma personal.
La artistas ha ido ganando prestigio desde que hace un año hiciera su primer tatuaje a su novio. Ahora la siguen en Instagram más de 27 mil personas y su trabajo se ha convertido en reclamo público.