PESADILLA
La tiktoker @lu.jimenezu ha contado en vídeo de cuatro minutos la aterradora historia de como un conocido la estuvo geolocalizando las 24 horas del día durante todo un año después de dejarle el teléfono por un minuto.
Vivimos en un mundo de redes sociales e Internet en el que hay que tener bastante cuidado con nuestras claves, con la información que compartimos y con las personas a las que dejamos el teléfono.
Un ejemplo de las cosas que nos pueden pasar es el que vivió en persona la tiktoker madrileña Lucía Jiménez y que te pondrá los pelos de punta.
En este vídeo de cuatro minutos, que ya han visto más de 200.000 personas, cuenta como una persona la tuvo localizada durante un año sin ella darse cuenta de nada de lo que estaba pasando.
"Hola queridos os traigo un storytime de cómo me estaban localizando 24 horas al día 7 días de la semana durante la friolera de casi un año sin yo darme cuenta de nada", empieza diciendo Lucia que explica "cómo lo hacían para que reviséis en vuestros teléfonos si a vosotros os lo están haciendo porque la gracia es la justa".
"Yo no voy a dar nombres porque legalmente me meto en fregao, pero hay una persona que está cucú, obsesionada conmigo", desvela.
"Un día hace un año y medio o dos yo estaba con esta persona y me dijo Lu me dejas un momento tu teléfono y yo en plan si toma, vi que no se estaba metiendo en nada raro. Me fui al baño, luego volví, me devolvió mi teléfono y no había nada raro", aquí fue donde cometió el error que provocó todo lo que vino después.
"Después la persona desapareció de mi vida porque por motivos de la vida me dejé de llevar y tuve contacto cero con esa persona pero no dejaba de encontrarme a esa persona. Llegaba a mi casa y me la encontraba, iba a un restaurante y estaba esa persona, a un centro comercial y me la encontraba. Pero no sólo en mi ciudad sino en todo Madrid y anda que no es grande, me olía un poco extraño pero yo no decía nada".
Al final cuenta que se lo dijo a uno de sus mejores amigos de la universidad que le dice "Lu has visto que no tengas en tu teléfono iniciada la sesión de alguna cuenta de esta persona en plan Instagram o Gmail".
"Yo fui a la universidad, le dejé mi teléfono a mi amigo. Este se metió en la aplicación Gmail y me dijo métete en gestionar cuentas. Mi reacción fue quedarme pálida cuando veo que tenía la cuenta de Gmail de esa persona en mi teléfono", dice cabreada.
"Resulta que hay una opción en el Gmail que tú puedes ver dispositivos que tienen iniciada mi sesión y te sale iPhone de Lu y donde está en ese momento, si está en Madrid, en Barcelona o en Andorra", explica Lucía.
"Revisad que no tengáis cuentas de Instagram y Gmail abiertas en vuestro teléfono porque pueden revisar donde estáis. Hay mucho esquizofrénico suelto y da miedo", sentencia Lucía cerrando esta aterradora historia de la que nos falta saber si ella decidió ir a la policía a denunciar a su acosador.