GRANDES MENTIRAS
Un tuit viral que relaciona perder peso con ser feliz ha hecho que miles de personas discutan sobre la influencia de la imagen propia en el estado de ánimo.
Ante una frase como "Si pesase X kilogramos menos/más, sería feliz", la respuesta más probable y políticamente correcta será que no es cierto, ya que la felicidad la encuentra la mente cuando está en paz consigo misma, y que quien se encuentra mal con cierto peso seguirá estando igual de mal mentalmente pesando más o menos. Pero no se puede negar que la percepción que tenemos de nuestra apariencia influye enormemente en nuestro estado de ánimo, y que es normal que muchas personas busquen cambiar su físico para sentirse mejor. Este dilema se ha visto reflejado en Twitter con este tuit viral reciente.
De la misma manera que no se debe censurar a una persona por querer someterse a una cirugía estética para sentirse mejor con su cuerpo, tampoco es normal faltar al respeto a alguien que busque cambiar su peso para mejorar su estado mental. Probablemente, lo que más falla en este tuit en particular sea la formulación del mismo: perder peso no te hará feliz, pero sí podrá ayudarte a sentirte mejor y, por tanto, a encaminarte hacia un estado mental más positivo. Pero ese cambio físico siempre tiene que ir acompañado de un trabajo de autorreconocimiento, ya que para la mayoría de personas, y sobre todo cuando se avanza en edad, las características físicas dejan de ser controlables, y la autoestima y la felicidad no pueden depender de ellas.
Sobra decir que, en caso de que quieras subir o bajar de peso o cambiar algo de tu aspecto físico, siempre debes hacerlo de forma responsable. Consulta a un experto del sistema de salud (no a un random que se anuncie por Internet) sobre qué puedes hacer para alcanzar tu objetivo, y asegúrate de que también trabajas tu salud mental mientras persigues esos cambios; a poder ser, con un profesional. ¡La felicidad está en tu cabeza, no en tu báscula!