POSTURA CORRECTA
Existe una clara relación entre nuestra postura corporal y cómo nos sentimos anímicamente. Como sucede con la alimentación, una buena postura a la hora de sentarse o andar nos resulta beneficiosa, sobre todo para los músculos, las articulaciones y la circulación sanguínea.
Si por el contrario tendemos a tener una mala colocación a la hora de sentarnos nos perjudica, ejemplo de esto puede ser encorvarse a la hora de mirar el ordenador. Todo lo que hacemos con nuestro cuerpo puede llegar a afectar de alguna manera a nuestro estado anímico.
El mayor motivo por el cual nos afecta directamente a nuestro estado de ánimo es porque influye en cómo nos vemos a nosotros mismos. Si nos encontramos tristes o cansados, nuestra postura cambiará inconscientemente, lo que tendrá un efecto en nuestra percepción de nosotros mismos, y este sentimiento puede ir a más.
Hay psicólogos que recomiendan cambiar algunas de nuestras costumbres a la hora de posicionar nuestro cuerpo y así sentirnos mejor. En el vídeo te mostramos consejos para mejorar nuestra higiene postural.
Dejar los brazos abiertos, con los hombros hacia atrás, sacar pecho y colocar la cabeza alta durante dos minutos nos ayudará a mejorar nuestra postura corporal y, como consecuencia, nuestro estado de ánimo. Esto sucede porque durante ese tiempo se libera testosterona y disminuyen los niveles de cortisol. Esta última hormona es la que se relaciona con el estrés y al liberarla dejamos de lado posiblemente mucha de esa carga que sintamos.