"UNA SOCIEDAD FALLIDA"
El emperador absoluto de la polémica vuelve a las andadas al recordar durante una entrevista cómo fue su paso por territorio español, en una muestra más de que la modestia no es su fuerte y que deja pequeños a polemistas profesionales.
En el historial de Andrew Tate lo de menos es que haya pasado por los cuadriláteros. A pesar de que su carrera como kickboxer fue sobresaliente, toda la buena reputación que pudiera haber acumulado en su época de luchador ha quedado enterrada en innumerables polémicas. Hace unas semanas su mera presencia en una fiesta hizo que despidieran a Ocelote (exjefe y 'descubridor' de Ibai) de la empresa que él mismo había creado.
Es una notoriedad que se ha ganado a base de explosivas declaraciones machistas que no dejan nada a la imaginación: desde describirse como "un absoluto misógino" a declarar que las mujeres "no deberían salir de casa ni conducir", pasando por confesar maltratos a exparejas y chulear de un estilo de vida rodeado por la controversia.
Hábil en los negocios, ha amasado una fortuna con casinos y cursos de autoayuda, refugiándose en Rumanía por, supuestamente, tener una legislación más laxa en los temas relacionados con violaciones. Una joyita, vaya, que además dice conocer bien España.
En una visita que hizo por nuestro país durante los peores momentos de la pandemia pudo hacer alarde de sus maneras, algo que contaba en una entrevista ayer mismo. "Fui a una gasolinera donde no me dejaron pasar sin mascarilla", cuenta, "así que les tiré el dinero después de llenar el tanque de mi Ferrari, donde me esperaba una zorra española".
Ante el reproche de otro usuario que le llamó al orden en el mismo establecimiento pidiéndole respeto, Tate tenía la típica respuesta de chulito: "Tu gobierno debería tenerte respeto a ti en vez de convertirte en un puto esclavo, gilipollas. Así que el tío se cagó, me subí en mi Ferrari, me follé a la zorra y conquisté España".
El discurso sigue con el mismo estilo de persona sin muchas luces y con las incomprensibles risas de sus entrevistadores (entre los que hay una mujer) y un mensaje a la altura de sus formas: "Que te jodan España, eso es lo que te pasa por decirme que me ponga la mascarilla".
En otro vídeo se le puede ver en autopistas de peaje, donde un amigo que le acompaña se queja de que "todo debería ser gratis en un agujero socialista como este". No solo de eso, sino de que el coche que llevan de camino a Benidorm "es una mierda" (habla de un BMW de alta gama), y a los operarios en los peajes les grita (en castellano) que "España es una sociedad fallida".
Su mención a "Pedro hijo de puta" en referencia al presidente es también memorable, junto a la de "España está acabada, que no vaya nadie allí". Si son turistas de su calaña y con su capacidad de análisis, de verdad que agradeceremos no contar con su presencia.