Paul, sufrió un terrible accidente que le partió el cuello y lo dejó en silla de ruedas. Le encantaba bailar y era una de las cosas que más echaba de menos tras el accidente. Sin embargo, cuando su hija Brittany anunció que se iba a casar y que para ella era muy importante que Paul abriera con ella el baile. Este decidió que tenía que intentarlo. Brittany buscó información y ayuda y finalmente contactó con un instructor de baile. El día de la boda Paul acompaño a Brittany hasta el altar como ella siempre había deseado y tras 17 años bailó de nuevo junto a su hija. Tras está fantástica noche, Paul ha decidido seguir bailando. Aquí podéis ver el baile de Paul y Brittany