BRILLANTE
El youtuber que más cerca está de ser ingresado en un manicomio logra una nueva genialidad sacándose de la manga una tendencia en honor a un cable.
Creo, y esto es una opinión, que si hay un creador de contenido español que se no se merezca tener ni un solo hater, ese tiene que ser Mister Jägger. Si 'solo' tiene 1,1 millones de seguidores en YouTube es directamente porque hay gente que no le entiende, y eso resta mucho en tema odiadores, que no suelen ser los más listos del lugar.
La inteligencia que debería quedar fuera de toda duda es la de este madrileño que cumplirá 27 años el próximo 10 de diciembre y que muchos de los que le conocen le definen como un genio absoluto. Por algo suma otro millón y pico de seguidores en Twitch y en menos de un año, una cifra mareante dado el tipo de contenido que sube.
El caso es que donde de verdad se le ve espontáneo y hasta generador de tendencias es en Twitter. Desde aprovechando una nevada para inmortalizar su rostro en un tuit de premio Oscar, a su tremendísimo análisis de los confinamientos, Jägger es un hacha en eso de hacer que la gente le siga la corriente... aunque no entiendan de qué va la cosa.
Por eso, cuando anoche antes de ir a dormir dejó caer que el 19 de noviembre era -para él- el Día Mundial del Interfaz Multimedia de Alta Definición. Lo que es lo mismo: el día del HDMi.
La absurda ocurrencia podría haber caído en su inmenso saco de las chorradas, pero no ha sido así. El amanecer de las redes sociales ha traído como tendencia nacional HDMi, sin que muchos supieran de dónde había salido la cosa.
Los tuits confundidos se mezclan con los de fieles súbditos en la religión de 'Jaggër Princesa', que saben que en realidad el caos y desconcierto son el pan de cada día en los streams de su creador favorito. De hecho, hasta fabricantes del cable se han subido a la tendencia (no sabemos si conocen el origen)
El caso es que Jägger puede ponerse otra medalla del Mérito a la Locura, una orden que no existe pero que perfectamente podría inventarse, registrarse y administrar el "Dios del Brócoli, Hijo del Sol y Enemigo del Viento". De hecho, ojalá suceda.