Estaba posando para una foto en Cinque Terre cuando una gigantesca ola le pilló desprevenida
ESTADOS UNIDOS
El teniente del Departamento de Policía de Kingman, Brian Zach, era sargento de patrulla en marzo de 2018 cuando lo llamaron a la casa de la pequeña Kaila, quien en ese momento había sufrido maltrato y múltiples lesiones a manos de sus cuidadores.
Brian consoló a Kaila mientras esperaban a que llegaran los detectives para llevarla al hospital. "Nos coloreamos, comimos bocadillos … me tomó de la mano y era una cosita linda," Zach lo explica en Good Morning America. "Una vez que llegaron los detectives, la recogieron y la llevaron al hospital".
Zach, padre de otros dos hijos, se fue a casa después de pasar horas con Kaila y le contó todo a su esposa, expresando que quería que la niña viniera a vivir con ellos.
Mientras tanto, Kaila estaba siendo tratada por múltiples lesiones como resultado del abuso físico. Según Zach, se presentaron cargos penales contra sus cuidadores.
Cuando los servicios de protección infantil no pudieron encontrar un lugar inmediato para Kaila, Zach y Cierra intervinieron. "El segundo día ella llamaba a mi esposa mama", recordó.
El 18 de agosto, aproximadamente 30 meses después de que Kaila llegara al cuidado de Brian y Cierra, los Zach adoptaron oficialmente a Kaila en el Tribunal Superior del condado de Mohave en la ciudad de Lake Havasu.