MUY CURIOSO
Cada año, cuando llega enero, una sensación generalizada se extiende entre la gente: el mes parece no acabar nunca. Aunque dura lo mismo que otros meses largos como diciembre, la percepción del tiempo cambia. Un hilo viral en X explica los motivos científicos y psicológicos que están detrás de esta impresión.
El mes de enero tiene 31 días, igual que diciembre, julio o agosto, pero muchas personas sienten que se hace eterno. Una usuaria de X, @AzucenaMS, ha compartido un hilo que se ha hecho viral explicando los motivos psicológicos y neurológicos que explican esta sensación.
El primer culpable, según la usuaria, es diciembre. La Navidad está cargada de emociones, reuniones, fiestas y regalos. Para muchas personas, es una época de felicidad que provoca una liberación constante de dopamina, la hormona del placer. "Cuando lo pasamos bien, parece que el tiempo pasa volando", explica en su hilo. Sin embargo, cuando llega enero, desaparecen esos estímulos placenteros y el contraste hace que el mes parezca más largo.
Otro factor que influye en esta percepción es el miedo o la incertidumbre. "Está demostrado que, cuando sentimos miedo, nuestra percepción del tiempo se ralentiza", indica @AzucenaMS. No es que enero produzca terror, pero es un mes en el que muchas personas afrontan la vuelta al trabajo, problemas económicos tras los gastos navideños y la incertidumbre del año nuevo. Todo esto contribuye a que la percepción del tiempo sea más lenta.
El hilo también menciona el "efecto Mandela", un fenómeno de la psicología cognitiva en el que muchas personas recuerdan hechos que en realidad no ocurrieron. "Al escuchar constantemente que enero se hace largo, nuestro cerebro lo interioriza y nos hace creer que realmente es así", explica la usuaria.
Sea por la ausencia de dopamina, la incertidumbre o el efecto Mandela, lo cierto es que la sensación de que enero es un mes interminable se repite cada año. La buena noticia es que ya queda poco para febrero, el mes más corto del año, que llega para equilibrar la balanza.