VECINOS
Salena Webb se había esforzado en decorar al máximo su jardín para este Halloween con un cementerio, esqueletos, tumbas y telarañas pero decidió quitar parte de las decoraciones cuando uno de sus vecinos llamó a su puerta para pedírselo.
Salena Webb, que se describe a sí misma como una "amante de Halloween", ya había puesto sus decoraciones en septiembre. Había un cementerio improvisado con lápidas de cartón, una telaraña gigante cubriendo su porche delantero y dos esqueletos de tamaño humano portando un pequeño ataúd.
Esta madre de cuatro hijos que vive en Duncan, Carolina del Sur, comparte predominantemente contenido familiar y de jardinería en TikTok, ahora se ha vuelto viral por quitar su decoración de Halloween después de que se lo pidiera uno de sus vecinos. Estamos acostumbrados a que muchas disputas vecinales acaben siendo noticia por motivos negativos pero este no es el caso.
Webb ha explicado sobre lo sucedido que el hijo adulto de sus dos vecinos rusos ancianos llamó a su puerta. Webb tiene una buena relación con la pareja, que vive al otro lado de la calle pero no hablan inglés con fluidez. En el pasado, intercambiaron verduras de su jardín y juguetes para sus nietos.
"Empieza a decirme que a su padre le diagnosticaron cáncer de pulmón. Y luego empezó a hablar sobre mis decoraciones de Halloween. Yo pensé: '¿Qué tienen realmente que ver mis decoraciones con esto?'"
Pero de repente se dio cuenta de todo: "Este tipo está lidiando con la muerte", dijo Webb, señalando que le había pedido específicamente que bajara el ataúd. El intercambio fue capturado por su cámara de seguridad Ring y luego lo subió a TikTok donde ya lo han visto más de un millón de personas.
Dado que el padre suele pasar tiempo en su garaje, que está directamente a la vista del jardín de Webb, ella dijo que era "obvio" tratar de aliviar el trauma que habían estado experimentando sus vecinos. Sacó el ataúd inmediatamente y al día siguiente decidió dar un paso más al día siguiente y quitar también las lápidas.
"Son un recordatorio constante de lo que podría pasar si él no supera el cáncer y no quiero causarle ese estrés a nadie más", ha asegurado.
Los artículos "morbosos" están en su patio trasero, pero probablemente sea demasiado caro rehacer su jardín delantero este año. "Estoy un poco triste por esto, pero no se trata de mí en este momento", dijo. "Para mí siempre queda el año que viene".