UN POCO DESCONCERTANTE
En una de las curiosidades más llamativas de la plataforma, un vídeo sin contenido visible se ha convertido en el más visto de toda la historia de TikTok. La pieza, que apenas muestra una pantalla en negro durante unos segundos, ha superado los 3.600 millones de visualizaciones desde su publicación.
Ni bailes virales, ni trucos de magia, ni retos imposibles. El vídeo más visto de TikTok es, paradójicamente, uno que no muestra absolutamente nada. Subido por el usuario Lasi en junio de 2023, el clip consiste únicamente en una pantalla en negro durante unos segundos. A pesar (o quizás por) su aparente simpleza, ha acumulado más de 3.600 millones de visualizaciones, superando a clásicos virales como el Zach King volando en escoba como si fuera Harry Potter, que hasta ahora ostentaba el récord con 2.300 millones.
El fenómeno ha generado una ola de comentarios y teorías en la propia plataforma. Muchos usuarios apuntan a la posibilidad de que el carácter minimalista del vídeo y su corta duración favorezcan que se reproduzca en bucle de forma automática, multiplicando así las visualizaciones sin que los espectadores sean plenamente conscientes.
En la sección de comentarios, los usuarios se dividen entre la incredulidad y la diversión. "3.700 millones de reproducciones para una pantalla negra… esto resume perfectamente internet", bromea uno. Otros, más escépticos, sugieren que el vídeo podría haber sido utilizado como experimento con bots de visualización, aunque no existe ninguna confirmación oficial al respecto.
A pesar de su impacto masivo, el vídeo dista mucho de ser uno de los más populares en cuanto a me gusta, con apenas 1.1 millones. Aun así, su viralidad ha resurgido en varias ocasiones, la más reciente en abril de 2025, cuando numerosos creadores comenzaron a hablar del insólito récord.
La anécdota llega en un momento tenso para la plataforma, justo cuando el presidente DonaldTrump ha firmado una nueva prórroga de 75 días para evitar el veto de TikTok en Estados Unidos. Mientras tanto, millones siguen viendo —con o sin querer— una simple pantalla negra que ha hecho historia.