Ibai actualiza a sus fans sobre su ceguera: "Del ojo izquierdo no veo una mierda, el diestro lo tengo sano"
SUPERVIDAYZIA
Campana y se acabó la supervivencia. Tras dos semanas de puro terror, persecuciones tan bucólicas como apocalípticas y deslealtades, ‘14 días’, el servidor de DayZ impulsado por IlloJuan, llegó ayer a su fin. Una experiencia tan breve como intensa y de la que solo han podido salvarse cuatro de más de 70 participantes.
¿Vamos a echar de menos ese mundo tétrico como pocos? Nada. ¿Vamos a echar de menos a nuestros streamers favs en plena supervivencia? Muchísimo.
En la esperadísima final hubo poco outfit de gala y muchas ausencias. Xokas y Rubius abandonaron este ensangrentado barco antes de tiempo y con alguna polémica de por medio. Una rencilla que lamentamos pero que no logró hacer sombra a la bajada de telón definitiva.
DayZ ha sido la piedra en el zapato para muchos creadores. Un videojuego complicado como pocos y que ha agotado a muchos de sus protagonistas. Ponemos la mano en el fuego porque no van a ser pocos los que aparquen por unos mesecitos cualquier relación con los zombis.
Lo entendemos oye, que si hemos sudado nosotros, no queremos imaginarnos por lo que habrán pasado ellos. Y tras traiciones, lágrimas y despedidas le llegó el turno a la coronación. Un eventazo en el que todos los que tuvieron las agallas de llegar al trayecto último se reunieron para el momento de la extracción.
¿Y qué es eso? Pues no es que un dentista apareciera en pleno stream para arrancar muelas del juicio a diestro y siniestro, hablamos de la salvación. En toda película de muertos vivientes que se precie el clímax llega cuando solo unos pocos logran el pase definitivo y sobreviven al 100 %.
El helicóptero hizo acto de aparición y en él únicamente había espacio para cuatro afortunados: DridGG, Wolfangkillers, LakhsartNia y PeroniaxDeluxe. Illo Juan, que vio pasar la victoria delante de sus ojos, reaccionó en directo a la celebración de Wolfang, que no daba crédito: “El único que tiene la mili”. El sobreviviente más longevo también fue el primerísimo en sentar sus posaderas en el vehículo y nos regaló un curioso baile para conmemorar la hazaña.
Cerramos una etapa y esperamos la siguiente, que el verano es largo y guarda muchas sorpresas, ¿os suena algo llamado TortillaLand? Pues pongánse cómodos y cojan aire que la que se viene no es pequeña.