NECESITA APOYO
Rebeca Stones ha explicado que ha ganado 25 mil seguidores en Instagram de la noche a la mañana, pero que estas personas son un público al que no quiere llegar, y que encima le están enviando miles de comentarios de odio.
Hay ocasiones en las que subir de seguidores no siempre supone una alegría, especialmente cuando el motivo por el que está ocurriendo viene de la mano de una gran cantidad de mensajes de odio. Esto es lo que le ha ocurrido a Rebeca Stones, quien a través de su perfil de TikTok ha compartido que, de la noche a la mañana, ha ganado más de 25 mil seguidores en Instagram, algo que al principio no entendía por qué estaba ocurriendo.
Por este motivo, después de investigar qué era lo que había ocurrido y mirar si se le había viralizado algún post o vídeo, ha descubierto que, efectivamente, uno de sus reels había superado de repente los 10 millones de visualizaciones. Este vídeo lo había publicado hace meses y, sorprendentemente, en lugar de hacerse viral en España, los espectadores que ha recibido son de Estambul y de "países árabes", algo que se plantea que puede haber ocurrido porque ha viajado a Maldivas y Estambul recientemente.
Según ha explicado, debido a que se trata de un trend en el que, al principio, aparece en ropa interior, porque consiste en ir mostrando las prendas mientras se viste, estas nuevas personas que la han seguido han empezado a insultarla y a decirle "auténticas barbaridades". Por tanto, el vídeo ha provocado que estas mismas personas comenzaran a seguirla. Se trata de un público al que, dice, no quiere llegar porque no le "aporta absolutamente nada, sino más bien todo lo contrario", ya que solo la insultan.
A raíz de esto, la tiktoker Marta Baos ha decidido contar que ella vivió una experiencia muy similar a la de Rebeca Stones, algo que le ocurrió poco después de empezar en TikTok. En su caso, el vídeo por el que se viralizó en estos países fue uno en el que se le veían "un poquitito las bragas", lo que provocó que también le siguieran este tipo de hombres. Por este motivo, aunque ha confesado que al principio se ilusionó al ver que de repente estaba ganando muchos seguidores, ha señalado que es algo que no le gustaría que le "volviera a pasar".
Finalmente, debido a todo lo ocurrido, tanto la comunidad de Rebeca Stones como muchas otras personas han comenzado a apoyar a la influencer para intentar minimizar el impacto negativo que los comentarios de odio están teniendo en su perfil de Instagram. Aunque parece que por ahora estos haters continúan actuando, esperamos que este mal trago acabe pronto.