REÍRTE DE TI MISMO
Hablamos con uno de los fundadores de un evento tan difícil de definir como sencillo de disfrutar, que el día 18 de marzo llenará de hombreras, brillantina, bandoleras y horterismo revivaluna fiesta única en el mundo.
Es hablar con Sergio Martínez, uno de los fundadores de Horteralia, y que te entren ganas de que llegue ya el 18 de marzo para poder asistir a un festival casi indescriptible. Como muchas de las mejores citas de este tipo, todo surgió hace ya muchos años de manera casi improvisada.
El éxito les pilló por sorpresa, como nos cuenta por teléfono: "Mi socio Conrado y yo siempre teníamos ganas de montar fiestas, como ya hacíamos en la facultad de Cáceres, y un día en un bar mítico de aquí elegimos el 20N de 2010 como la primera edición de todo esto. Se nos fue un poco de las manos porque La Machacona se petó". Por cierto, el lema del evento es 'El festival que parte la pana'.
Aquello fue todo "muy amateur", con catering rollo "paellas en noviembre, que se regalaron los del local", un largo camino que han recorrido hasta juntar en la edición de 2023 a los imparables Ojete Calor, Nancys Rubias, Rosa López, Raúl, Supremme De Luxe, Leonardo Dantés, Sonia Madoc, Ku Minerva, Mikan, Cherry Coke, Privan de Camp, así como las divas atemporales Marlene Morreau y Karina.
"¿Por qué no va a estar Karina en un line-up si su música nos sigue haciendo felices? Nos da igual que no estén de moda, los artistas que vienen son capaces de conectar, y lo fundamental es que sea música bailable. Queremos que aquí se baile mucho, cada vez se baila menos en festivales".
"La premisa es tener mucho sentido del humor y capacidad para reírte de ti mismo", dice sin pensar ni un segundo Sergio cuando le preguntas de qué va Horteralia. "Es plantarte delante del espejo, coger cosas del armario que no te atreves y decir 'voy a salir así a la calle'. A lo mejor en Londres, Madrid o Barcelona no es tan raro, pero en capitales de provincia la vida es más conservadora".
"Te permite desinhibirte de las modas y conectar con tu pasado, todo desde un punto de vista del buen rollo. Si sales de casa con esa mentalidad, tienen que pasar cosas muy graves para que no te lo pases genial". ¿Y sobre la gente que va a esto? "Tenemos público de 60 años, otros de 18, vienen niños con sus padres, colectivo LGTBI, heteros, gente que busca recordar otros tiempos... el que es capaz de conectar es bienvenido".
Muy cerca de colgar el cartel de todo vendido, Sergio subraya que "vigilamos el aforo porque el público es el protagonista, queremos que haya espacio de sobra para bailar. Se producen congas colectivas, es un fenómeno donde los desconocidos bailan juntos y se mezcla todo el mundo, recuperando el espíritu de las verbenas de pueblo".
Fíjate si el público es importante que "el evento de la noche es la entrega de la Bandolera de Oro y las Hombreras de Plata", dos reconocimientos a los asistentes con atuendo más chabacano. Ojeadores entre el público van evaluando a los candidatos, y los ganadores "suben al escenario en el momento más importante".
El único premio es el reconocimiento y el cachondeo, rodeado de nombres míticos de lo hortera, un concepto "subjetivo" para los organizadores. Nos viene a la mente la frase de Oscar Wilde: "Después de todo, ¿qué es la moda? Desde el punto de vista artístico una forma de fealdad tan intolerable que nos vemos obligados a cambiarla cada seis meses". Hubiera sido un espectador privilegiado en Horteralia.