PARTIENDO LA PANA
Conrado Gómez, cofundador del festival más personal de España y probablemente Europa, explica las dificultades de mantener la esencia de una cita que cumple 15 años
Lo normal en la industria musical, y más en la parte relacionada con los festivales, es que los promotores hablen con grandilocuencia y ambición sobre a dónde quieren llegar. Se ven a sí mismos como el nuevo Woodstock, con ofertas mejores que el Love Parade y artistas suplicando que les hagan un hueco. Horteralia, y sus fundadores, son de otra pasta.
Si hace dos años hablábamos con Sergio Martínez, en 2025 ha sido su socio Conrado Gómez quien ha sacado hueco para dar su particularísima visión del sector. Recordemos que nos habla desde Cáceres, una provincia riquísima en cultura pero más bien necesitada en infraestructuras que la conecten con el circuito habitual del espectáculo.
"Hacemos una edición de Horteralia en Madrid para llegar a más gente, claro", y antes explica el lema de Horteralia. "Es el primer festival que reivindicó que hay otras formas de ser, de vestir y de divertirse, y por aquello de romper la pana. Es el elemento que han llevado las generaciones anteriores y cuando tú lo rompes, le da a un elemento antiguo un toque de modernidad". Si pensabas que la entrevista iba a ser típica, olvídate.
El cartel incluye los muy eurovisivos Nebulossa, Sonia y Selena, La Casa Azul y Karina, una clásica de la cita, pero huye de las modas porque sí y de subirse a la ola de la nostalgia. "Casi todas las grandes propuestas artísticas de este país pertenecen a fondos de inversión que están comprando todo, quedamos muy pocas marcas con independencia suficiente".
Sorprende la honestidad de Conrado, que asegura que Horteralia "sería otra cosa si lo ampliáramos en varios miles de espectadores más". Es más: "Ofrecemos una experiencia única, y nuestra marca está por encima del artista. Y, entre comillas, te tiene que dar igual quién esté en el cartel, porque te lo vas a pasar bien igual". Dime si eso no es una declaración de intenciones…
Todavía sin fechas públicas, reivindica que la experiencia completa de Horteralia está en Cáceres, donde el festival dura dos días y "toda la ciudad vive ese ambiente". No será por medios: "15.000 metros cuadrados, coches chocones, los camellos de la feria, foodtrucks…".
Ojo, que Horteralia Madrid es otro fiestote inigualable, pero "es solo que en la capital tienes que competir con mucha más oferta". Te lo adelantamos: por mucho que diga Conrado, no hay quien compita en locura, cercanía y pasión con estos apasionados de la música. Si en carnavales te pones máscaras, en Horteralia te la quitas. Palabra de Flooxer. El 22 de febrero en IFEMA.