ESTRATEGIAS
Israel ha conseguido muchos puntos en Eurovisión, tanto del jurado profesional como del televoto, desde que despuntó de nuevo el conflicto contra Palestina. Este año, las apuestas auguran también una buena posición para este país en el festival. ¿Por qué ocurre esto?
Una de las frases más repetidas a la hora de opinar sobre el Festival de Eurovisión es que "Es todo política"; pero esa frase ha tomado un nuevo cariz desde que comenzasen los conflictos armados entre Rusia y Ucrania, y entre Israel y Palestina. El primero de ellos trajo la victoria de Ucrania en Eurovisión y la expulsión de Rusia del line-up de países participantes, pero el segundo ha supuesto un ensalzamiento del sentimiento antipalestino, aupando a Israel con los votos. ¿A qué se debe esta diferencia en el trato, y qué sentido tiene ese apoyo a Israel en Eurovisión?
No son pocos los que señalan que Eurovisión es percibido como un termómetro del ambiente europeo, una forma de medir cuáles son las opiniones de los habitantes de esta parte del mundo. El año pasado hubo un sentimiento pro-Palestina muy evidente en redes entre los espectadores tradicionales del festival, pero muchos jurados profesionales y televotos de países aliados de Israel mostraron su apoyo masivo para intentar que este país se alzase con la victoria. Aunque no lo lograron, sí que consiguieron que, a ojos de la comunidad internacional, se percibiese que Europa apoyaba a Israel. Sin ir más lejos, el televoto español dio sus 12 puntos a este país.
Aunque el festival tiene sus normas (entre ellas, que los países que inicien un conflicto bélico con otro estado no podrán formar parte del evento), la organización no se ha decidido a dar el paso de expulsar a Israel de Eurovisión. En primer lugar, porque supondría reconocer la identidad de estado de Palestina, en vez de considerar el conflicto como una guerra civil; y en segundo lugar, porque eso pondría en riesgo el soporte económico del evento, que recibe su mayor apoyo de parte de un sponsor israelí. La presión por contentar a los patrocinadores es tan grande que en la edición del año pasado se silenciaron los abucheos a Israel y se sustituyeron por vítores y aplausos pregrabados.
A unas horas de la edición de 2025, Israel mantiene unas buenas previsiones en las apuestas, en lo que a su resultado final se refiere. El boicot al festival a nivel internacional es más grande que nunca, a pesar de que todos los fans españoles estén deseosos de ver cómo se desempeña Melody con su canción. ¡Habrá que ver qué ocurre este año con los muy probables abucheos!