El momento en que una bomba de palomitas de maíz explota en mitad de una calle de China
Teoría de Anonymous
"Tim Bergling, más conocido por su nombre artístico Avicii, no se suicidó. Le mataron porque sabía demasiado". Es la última teoría conspirativa que ha salido en las últimas horas a raíz de unas supuestas filtraciones de Anonymous, el grupo de hackers internacionales que dicen luchar por un mundo antisistema.
El célebre DJ perdió la vida en Mascate, la capital de Omán, hace poco más de dos años, y aunque las circunstancias de su muerte estuvieron inicialmente rodeadas de misterio las autoridades no encontraron "ningún indicio de que se hubiera cometido un crimen". La causa del fallecimiento está archivada, según la policía de la ciudad omaní, como "suicidio por pérdida de sangre", después de que se hiciera "intencionadamente" cortes con una botella rota.
Es por lo visto una explicación que no le vale a todo el mundo, ya que en Twitter hoy ha corrido el rumor a nivel internacional de que el artista habría sido víctima de un asesinato para silenciarle. Al parecer, miembros de Anonymous han asegurado que el sueco, de 28 años en el momento de su muerte, fue asesinado para que no contara cosas sobre un supuesto grupo social conocido como 'Élite'.
Esta información aflora, curiosamente, justo un día después de que se estrenara un documental sobre Jeffrey Epstein y coincidiendo con las violentas protestas en Estados Unidos por la muerte de George Floyd. Epstein fue hallado muerto en circunstancias sospechosas en una cárcel hace poco menos de un año, acusado de montar una red de prostitución de menores para los ricos y poderosos de 'Élite'. Los defensores de la conspiración dicen Avicii habría sido testigo de ello, y de ahí que "se lo quitaran de en medio".
Según Anonymous, la mayor prueba de que el sueco estaba al tanto y que incluso intentó denunciar la situación al mundo fue el videoclip de 'For a Better Day', un himno del género EDM que muestra cómo unos hombres adinerados secuestran niños para sus malévolas intenciones.
No solo eso, sino que dicen que el accidente de Paul Walker (actor de Fast & Furious), el de Lady Di y el ahorcamiento de Chris Cornell (cantante de AudioSlave) fueron por el mismo motivo que por el de Avicii: silenciarles antes de que contaran al mundo que 'Élite' existe. Una historia de película que, ya solo en el caso del cantante sueco hace aguas por numerosos motivos.
Además de que la policía omaní no encontrara ni rastro de que hubiera sido asesinado, la familia fue la primera en admitir que el DJ se había suicidado. El comunicado de sus padres decía exactamente que "Tim era un alma artística buscando respuestas a preguntas existenciales" y que "no estaba hecho para el mundo musical en el que se movía".
Las siguientes razones para dudar de la información de Anonymous vienen del documental 'True Stories', que retrata la última etapa profesional del artista y donde este confiesa que está atravesando una dura depresión, que es alcohólico y que es adicto a los tranquilizantes. Compañeros de trabajo, representantes y amigos explican que estaba en una espiral autodestructiva, y que no salía de fiesta a menos que fuera por obligación de sus conciertos.
Por eso es raro, por seguir enumerando razones, que Avicii asistiera a ninguna fiesta de Jeffrey Epstein, que las celebraba mayormente en una isla privada a todo lujo. Algo que no encaja para nada con la personalidad sobria del artista. Por no mencionar que no hay ni una sola prueba de que Avicii conociera de nada al magnate pedófilo.
Y de ahí precisamente viene el último argumento para plantearse si lo que dice Anonymous es verdad o mentira: como su propio nombre indica, son fuentes anónimas, que no aportan fotos ni documentación para demostrar sus acusaciones. Solo que el videoclip de 'For a Better Day' habla, supuestamente, de tráfico de menores.
No hay más que mirar el resto de videoclips de Avicii para ver que hay un patrón oscuro más consistente con alguien deprimido que con alguien que oculta un grave secreto. Más que nada porque siempre podría haber denunciado él, Lady Di, Paul Walker o Chris Cornell estar en conocimiento de abusos y violaciones, en vez de montarse una peli de miedo a partir de un cotilleo de Twitter sin bases tangibles a día de hoy.
Vamos, tiene pinta de que los que se tragaron que Bruno Mars era hijo de Michael Jackson quisieron repetir la broma sin aportar, como en aquel caso, nada más que alocadas teorías. Todo aprovechando un clima de tensión en redes sociales... lo que faltaba.