El emotivo momento en que un niño paciente de cáncer se reúne con sus hermanos tras seis meses en el hospital
UN PROYECTO DE SEIS CORTOS TE PONE COMO ESPECTADOR DE LOS ABUSOS
David Schwimmer (Ross Geller, de 'Friends') participa en un proyecto escalofriante sobre el acoso sexual de la realizadora israelí Sigal Avin. #ThatsHarassment quiere demostrar en seis cortometrajes que el acoso sexual se extiende en todos los ámbitos de la sociedad. Tu jefe, tu médico, incluso al político al que votas.
Te propongo participar en un experimento, pero no a cualquiera, sólo a la mitad de la población, para cuando estés en una reunión de trabajo o con un cliente.
Alguien que por amable que sea, te desagrade físicamente, piensa que esa persona te está piropeando, que sus ojos están refregándose en tu cuerpo y que insiste en decir lo bien que te queda esa ropa, que te pone una mano en el hombro, tal vez en la pierna, y te propone ir a tomar algo, ¡pero sólo como amigos! y lo que surja, claro.
Piensa que en una parte de su imaginación sabe que está por encima de ti, él es tu jefe, o un cliente al que debes agradar, y esa imaginación suya le hace creer que tal vez vaya a acabar con su lengua en tu boca. Imagina que la saliva que segrega reza por meterse en tu boca.
Como ves, esto que te propongo no es un juego inocente, si aceptas el reto y eliges bien al espécimen (alguien por encima de ti, que no te atraiga lo más mínimo), probablemente, acabes sintiendo un escalofrío por la nuca, cierta presión en la boca del estómago, y una ganas importantes de vomitar.
Además de sentirte como una mierda. Porque todo lo que eres y todo lo que pretendes ser: una persona libre, valorada, profesional y respetada, acaba siendo empaquetado con un papel de regalo que dice “estoy aquí para que me follen”. El resto da igual, cuando alguien hace clic en este juego tú te conviertes sólo en eso para él.
Si has leído hasta aquí, ya has dado el primer paso para avanzar en este juego: has acertado que este experimento es sólo para los hombres, la otra mitad de la población no necesita imaginar.
La no tan delgada línea que separa el cortejo del acoso está muy clara cuando nos referimos a entornos laborales. Ahí no cabe el error. Un cliente no puede insinuarse a una vendedora, un médico a una paciente, un director de cine a una actriz, político a una periodista, etcétera.
La situación de poder del jefe sitúa a la víctima del acoso bajo un grillete de vulnerabilidad. Y lo peor de todo: pese a ser desagradable, todo se dice sonriendo, nadie “parece” ser irrespetuoso. ¡Yo sólo te he dicho que hoy estás muy guapa!
La directora de cine israelí Sigal Avin se propuso retratar ese tipo de encuentros en una serie de cortometrajes titulada “Esto es acoso” (#ThatsHarassment).
Así de claro por si alguien tiene dudas sobre dónde está esa delgada línea, o por si quieres sentirte realmente incómodo viendo cómo les cambia completamente la expresión de la cara a las víctimas del acoso mientras y las caras de los tipos se convierten cada vez más en la de unos gilipollas.
Los cortos están disponibles online y no tienen desperdicio, cada uno ocurre en un entorno diferente: 'El compañero de trabajo', ‘El actor famoso', ‘El jefe', 'El médico', 'El fotógrafo' y 'El político’.
Todos ellos están inspirados en casos reales conocidos por Avin, y han sido interpretados por rostros más o menos populares del cine y de la televisión de EE UU, en especial David Schwimmer (Ross Geller, de ‘Friends’).
‘El compañero de trabajo‘, con Grace Gummer y Joseph Sikora:
‘El actor famoso‘, con Cristela Alonzo andy Noah Emmerich:
‘El jefe‘ con Zazie Beetz y David Schwimmer:
‘El médico‘, con Cynthia Nixon y Michael Kelly:
‘El fotógrafo‘, con Anna Van Patten y Bobby Cannavale:
‘El político‘, con Emmy Rossum y Harry Lennix: