SE HA OPERADO POR SEGUNDA VEZ
María Pombo ha confesado que se ha sometido a una rinoplastia por segunda vez y ha explicado que los motivos para volver a pasar por quirófano han sido muy distintos a los de la primera ocasión.
María Pombo ha vuelto a las redes sociales después de unos días desaparecida. Se rumoreaba que se había sometido a una intervención quirúrgica y, efectivamente, así ha sido.
Ella misma ha sido la encargada de confirmarlo y de compartir con sus seguidores que estos cinco días ha estado alejada de las redes debido a una nueva operación de nariz.
No es la primera vez que Pombo se somete a una operación de este calibre y, a diferencia de otras chicas de su gremio, nunca ha tenido problemas en contar todo el procedimiento llegando incluso amostrar fotografías del antes y el después.
María Pombo nunca ha estado del todo contenta con su nariz debido a motivos de salud: A los 9 años se rompió la nariz por primera vez en la feria cuando iba montada en los coches de choque. Más tarde, a los 13, volvió a tener un accidente en la piscina de su casa cuando su perro se abalanzó sobre ella haciendo que se le rompiera otra vez.
Esto provocó que se le desplazara el tabique nasal impidiéndole respirar con normalidad y haciendo que la nariz le sangrara diariamente. A partir de entonces, según ha confesado en múltiples ocasiones, se obsesionó con las narices, llegando a ser la primera cosa en la que se fija cuando conoce a una persona.
Esta inseguridad hizo que a los 23 años decidiera operarse para solucionar este problema de salud. Ahora, la influencer ha confesado que en este caso la rinoplastia se ha debido únicamente a motivos estéticos.
A través de sus historias de Instagram ha respondido largo y tendido a las preguntas que le estaban planteando sus seguidores y ha querido sincerarse sobre la diferencia entre ambas operaciones.
Según María Pombo, la presión por ser una prescriptora con casi medio millón de seguidores hizo que acudiera a la primera intervención con mucho “miedo e inseguridades” y le pidió al cirujano que “no cambiara el gesto” de su nariz para seguir siendo ella. Después de esa primera operación sus problemas de salud desaparecieron: “no era una nariz perfecta pero yo estaba contenta”.
La influencer quería seguir siendo ella y no tener una nariz con aspecto de “barbie” pero, su nariz ha ido evolucionando durante estos dos años y medio: “se me fue cayendo la punta (...) tenía un cartílago que me veíais y me decíais que parecía que tenía un moco”.
Estos problemas han causado que vuelva a estar incómoda con su nariz hasta que por fin acudió a un cirujano, un conocido desu marido Pablo Castellano, la examinó y le dio la confianza que necesitaba: “no es una obsesión mía con las narices sino que un profesional ve que mi nariz no está bien (...) Ha sido una operación por estética y por mi salud mental (...) Cuesta mucho hablar de ese complejo en voz alta y él supo explicarme porqué no me gustaba mi nariz”.
En las fotografías que ha compartido hemos podido ver cómo ha cambiado su nariz: el tabique afinado, menos cartílago en la punta y una apariencia un poco más respingona. Sin embargo, todavía tendremos que esperar para ver la nueva cara de María Pombo.