INVASIÓN
Un vídeo que muestra la enorme cantidad de tiktokers que graba en la Plaza del Callao de Madrid ha hecho que muchos pongan en cuestión que esta actividad esté permitida. ¿Hasta qué punto cumplen con la normativa local todos estos creadores de contenido?
TikTok es una de las plataformas más en auge de las redes sociales, y tiene su propia tipología de contenidos característicos, que solo se pueden encontrar, además de en ella, en Instagram Reels y en YouTube Shorts, sus dos principales imitadoras. Aunque lo de ser tiktoker genera mucha mofa, y la población de una edad más avanzada sigue viendo a estos creadores con malos ojos, lo cierto es que son muchos los que ponen un esfuerzo en crear contenido interesante para la app, y eso incluye rodajes semiprofesionales en el exterior: con trípodes, cámaras de alta gama, equipo de iluminación, compañeros de rodaje… En definitiva, los tiktokers llevan, en ocasiones, un equipo mejor que el de un reportaje de televisión. La Plaza del Callao de Madrid es uno de los puntos en los que más tiktokers se concentran, y un vídeo reciente al respecto ha despertado un debate en torno a la legalidad de su actividad.
Un tiktoker que decida grabar en la Plaza del Callao de Madrid tiene dos problemas: el primero, que cualquier rodaje con equipo técnico y material requiere de un permiso especial del Ayuntamiento de Madrid (que se puede solicitar aquí), y el segundo, que esta localización está llena de edificios registrados en la propiedad intelectual y/o que tienen en su fachada carteles de marcas comerciales. Si aparece un edificio registrado en el fondo del vídeo, es necesario contar también con el permiso específico de ese edificio en concreto, y es muy probable que sea necesario pagar para conseguirlo. Si sale alguna marca en el fondo, no habrá problema siempre y cuando el vídeo no genere un daño directo a la imagen de esa marca.
Si se cuenta con un equipo como los que salen en este vídeo que se ha hecho viral, en principio es suficiente con pedir el permiso de Acto Comunicado, que es totalmente gratuito. Si el equipo cuenta con más de quince integrantes, dificulta el tráfico o el paso de peatones, utiliza efectos especiales durante el rodaje o interviene con parte del mobiliario urbano (por ejemplo, grabando sentados en un banco o apoyados en una estatua), entonces se necesita el Permiso de Ocupación de la Vía Pública, que cuesta unos cincuenta euros y puedes rellenar aquí. ¡La Plaza del Callao no es un sitio discreto como para rodar allí sin permisos!