TODO UN EJEMPLO
La esperada secuela de Hollow Knight, Silksong, llegará al mercado por 19,99 euros, una cifra muy por debajo de lo que muchos jugadores esperaban. La decisión de Team Cherry ha sido recibida con entusiasmo y halagos por parte de la comunidad, que destaca la coherencia del estudio con su filosofía original.
El anuncio del precio de Hollow Knight: Silksong ha generado una oleada de comentarios positivos en redes sociales. Lejos de seguir la tendencia al alza en los precios de los videojuegos de gran envergadura, Team Cherry ha decidido fijar la secuela de su exitoso título en 19,99 euros, lo que supone una notable diferencia con respecto a los estándares actuales del sector.
La reacción no se ha hecho esperar: numerosos jugadores y medios especializados han celebrado la noticia, señalando que se trata de una decisión que refleja la identidad del estudio australiano, caracterizado desde sus inicios por un enfoque independiente y cercano a la comunidad. En un contexto en el que los lanzamientos de grandes franquicias superan habitualmente los 60 o 70 euros, la cifra anunciada ha sorprendido por su moderación.
En declaraciones recogidas por distintos portales, usuarios han subrayado que el precio refuerza la imagen de confianza y respeto que Team Cherry ha cultivado desde el lanzamiento del primer Hollow Knight en 2017. Para muchos, la elección de un coste accesible no solo beneficia a los jugadores, sino que también consolida la reputación del estudio como uno de los referentes de la escena independiente.
El bajo precio no ha hecho disminuir las expectativas sobre el juego. Al contrario, la comunidad mantiene un alto nivel de entusiasmo por Silksong, que lleva años considerado uno de los lanzamientos más esperados en el ámbito del videojuego. Su propuesta promete expandir y perfeccionar la fórmula original, con nuevas mecánicas, personajes y un mundo inédito por explorar.
Con esta estrategia, Team Cherry refuerza su vínculo con los seguidores y se desmarca de las políticas habituales de la industria. A la espera de su fecha de lanzamiento definitiva, la secuela se perfila como un éxito no solo en términos de jugabilidad, sino también como ejemplo de cómo un estudio independiente puede marcar la diferencia en un mercado competitivo.