I SAW THE SIGN
Hay ocasiones en las que una persona tiene dificultades para diferenciar entre las amistades honestas y las que no son de verdad. Aquí tienes unas cuantas señales de que una amistad es falsa.
Cuando una persona aparece en los días bonitos y está totalmente out cuando vienen los nubarrones, es probable que no esté aportando lo que una amistad debería aportar en tu vida. Puede que, incluso, recurra a ti solo para cierto tipo de ocasiones en las que le resultas conveniente: por ejemplo, para salir de fiesta o para tomar un café y desahogarse sobre su último drama.
Si vuestras conversaciones siempre consisten en tener a esa persona diciendo "A mí me pasa igual", "Yo lo tuve peor porque…", "Si fuera tú, yo haría…" y ese tipo de expresiones egocéntricas, recuerda que no te está escuchando: solo usa tus vivencias para poder hablar de sí misma y compararse.
Si le cuentas cosas que para ti son importantes y reacciona como si estuvieses hablando del tiempo, ahí no es. Una verdadera amistad se alegrará de tus éxitos y sentirá interés en ti, y también te apoyará cuando le cuentes algo que no te ha ido bien.
Si cada vez que quedáis se dedica a criticar a otros, que no te quepa duda de que también te criticará a ti cuando quede con otras personas. Aléjate de las personas venenosas.
Ninguna amistad es perfecta, pero lo importante es que siempre hagas balance: ¿te aporta más de lo que te quita? Si la respuesta es no, entonces tal vez sea el momento de tener una buena charla con esa persona, o directamente de eliminarla de tu vida.