Le dejan un mensaje homófobo en su comunidad de vecinos y responde con un cartel de lo más contundente
Por las risas
Decir que 2020 ha sido un año raro de narices es como decir que el sol sale por el este. Es algo tan obvio como que Twitter se tome las situaciones más serias con la mejor de sus caras, porque los estudiantes han compartido por redes un montón de cachondadas referentes a los exámenes.
Están siendo los días del EBAU, y los hay que se prepararon las fechas importantes con códigos de alarma: la hora como fecha, y el nombre del aviso como descripción de un momento histórico. Con el móvil vibrando todos los días, imposible olvidarse.
No faltan aquellos que quieren dar el último repaso con los apuntes de otros, pero hay casos en los que WhatsApp nos recuerda cómo funciona la cadena de favores...
Si Chicote es capaz de levantar un negocio ruinoso y convertirlo en un dos estrellas Michelín... ¿por qué no te va a ayudar también a aprender algo de historia?
Luego están aquellos que se ponen en la peor de las situaciones siempre, y que normalmente acaban con una notaza. Anda que no da rabia...
Encomendarse a santos nunca estuvo de más, aunque las figuras a las que adoran los jóvenes van cambiando. Ya puede ser virgen hasta Bad Gyal:
Y no te engañes: estudiar a última hora no tiene por qué ser malo. A veces, las ganas de saltar al escenario pueden hacer maravillas con el resultado final del examen. Tú ponle ganas, lo demás ya vendrá solo.
Cómo olvidar, por cierto, esa mezcla de sensaciones que provoca saber que en unos días termina todo (felicidad absoluta) pero que antes de llegar a ese punto te esperan ratos malos malos (desesperación infernal)
Es importante recordar a los valientes, que se dejaron parte del temario fuera de su repaso y que cuando les salió la pregunta en el examen de algo que no habían mirado, debieron decir algo así como "aquí hemos venido a jugar".