El aterrador momento en que un estudiante de piloto abre la puerta de un avión en el aire
BECARIA
Existen célebres tradiciones atávicas de magia, filtros y rituales para encontrar el amor, conseguir sexo con la persona deseada o aumentar la libido de un marido aburrido que a cualquier persona "normal" le pueden hacer partirse de la risa, pero estamos en una época de máximo apogeo del mercenarismo magufo que no entiende de ciencia ni raciocinio para un considerable sector de la sociedad. No debemos olvidar que esta gente también vota, pero ese ya es otro tema que hoy no toca. El repunte del esoterismo capitalista nunca había alcanzado tan altas cotas de beneficios económicos, y sobre todo, de gilipollez. Rimando con el fervor de Halloween, lo zombie y lo tenebroso, existen ritos sexuales ancestrales que encajan a la perfección con esta fecha de los muertos vivientes, que a veces cuesta diferenciarlos de los fenecidos clínicamente.
Pelos de axila para atraer a la persona amada
Estas creencias magufas con más siglos que la leyenda del Santo Sudario de Cristo, parten de que toda secreción orgánica o partícula corporal de una persona, como pueden ser la saliva, el sudor, una uña o un mechón de pelo, llevan retenida la energía originaria del propio individuo y, por lo tanto, puede resultar útil en un procedimiento mágico. Un ritual que no desentona nada en la noche de Halloween, dice que para conseguir atraer a la persona deseada deben arrancarse tres pelos de la axila izquierda y tres de la axila derecha, luego quemarlos sobre un hierro candente, coger la ceniza y esconderla en un trozo de pan que se le ofrecerá a la persona amada. El proceso requiere tesón y constancia, pues la operación debe repetirse tres veces y siempre en viernes. Perfecto para comenzar el 1 de noviembre de este año, que precisamente cae de viernes. ¿Qué puede salir mal?
Pelos de pubis y uñas de gata para obtener el amor de una mujer
Orientado a conseguir el amor de una mujer, como decía una canción de Bustamante que ponen en todas las ferias de pueblo de verano, el hombre enamorado tendrá que dejar secar unos pelos de su pubis y axila, y uñas de gata incineradas. No especifica tiempo, por lo que el momento óptimo para pasar a la acción queda a la interpretación del hechicero. Luego se le añadirá un aceite inventado cualquiera y dos gotas de ajenjo, y se le suministrarán los polvos a la amada en el café. La efectividad no se verá alterada si el café va endulzado con azúcar moreno o sacarina. Señores, fin de la cita.
Hechizo con material orgánico y hierbas para triunfar sobre una rival
Vamos a suponer que estás en la discoteca Pachá de Ibiza, te gusta un tipo guapísimo, con cuerpazo y con cara de leer todas las noches algún libro de poemas de tu poetuitero favorito. Te encanta. Pero como no podría ser de otra manera, tiene a un montón de chicas rondando y la competencia es más bien alta. El ritual infalible dicta que debes robar al hombre deseado un cabello y realizarle tantos nudos como mujeres aspiran a ligárselo, diciendo en voz baja sus nombres y apellidos. Esto ya requiere trabajo de investigación y reza para que el tipo no esté calvo. Es un hechizo que debes llevar pensado de casa, porque luego deberás quemar su pelo con hojas de nogal y de laurel, y flores de verbena, diciendo en voz alta y durante tres veces consecutivas: “Scheva anula el poder de mis rivales”. Spoiler: su efectividad huele a chamusquina.
Un manjar delicatesen para conquistarle
Este tipo de ritual ya requiere haber cohabitado al menos una vez con el macho deseado. Se trata de ofrecer al tipo una taza de chocolate, té o café a la que debes añadir canela en polvo, un cuarto de vainilla y nuez moscada. Hasta aquí todo “normal”. El plato gordo es que ¡debes colar la bebida con un trozo de camisón de dormir utilizado durante la última vez que hayas tenido sexo con este buen hombre amado! Y eso si usas camisón. Tras esta gloria, también deberás invitarlo a cenar una fritada de huevos batidos, que no es lo mismo que batirle los huevos, proceso durante el cual recitarás el siguiente mantra: “Este fuego que me devora pase al corazón de Francisco (o como se llame el fulano), como estos huevos pasan de una fuente a otra”. Luego le servirás unas albóndigas de carne. Y ahora estarás pensando en la reciente noticia de la señora de Cabezón de la Sal que repartió albóndigas entre su vecindario, supuestamente de carne de su amante asesinado. Vaya, la receta perfecta para disfrutar de una noche de Halloween para chuparse los dedos…
Para aumentar la pasión
Y como es evidente que alguno de los anteriores hechizos acabará funcionando, una vez conseguido el propósito ya podrás ajustar mágicamente el nivel de pasión sexual. El ritual definitivo dice que debes coger la ropa interior que ha utilizado la pareja antes del acto sexual, sumergirla en agua de fuente y dejarla así durante toda la noche. A la mañana siguiente tendrás que amasar un pan mezclando la harina con dicho agua, es decir, el usado para remojar los calzoncillos o bragas de la pareja, y luego dárselo de comer a un perro. Reitero lo dicho inicialmente: ¿qué puede salir mal?
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