¿MILAGRO O CONDENA?
Liam Payne ha sido el último en someterse supuestamente a una bichectomía, y su resultado no está gustando a muchos de sus fans. Este procedimiento se ha convertido en toda una tendencia entre las celebrities, pero los expertos señalan que no es apta para todo el mundo.
Es muy habitual ver a los famosos pasar por el bisturí y sorprender con algún cambio estético, y cada vez son más los influencers que también se animan a pasar por quirófano. Pese a que esto es algo que lleva muchos años ocurriendo, las tendencias van variando con el paso del tiempo, y en esta ocasión ha sido Liam Payne quien ha caído, supuestamente, ante una de las operaciones más populares del momento: la bichectomía, un proceso en el que se afina el rostro quitando las bolas de Bichat, unos cúmulos de grasa que se encuentran en las mejillas.
Pese a que este cambio estético es cada vez más común y ya son muchas las celebrities que han pasado por él, no son pocos los fans que no se sienten del todo convencidos con los resultados que deja en sus famosos favoritos. En el caso de Liam Payne, las fotos demuestran que antes tenía unas mejillas bastante rellenas y una mandíbula poco marcada, pero que en su última aparición esto ha cambiado por completo.
La bichectomía sería la causa de que sus pómulos se viesen ahora tan hundidos, y aunque es un look que abunda entre las celebrities y los modelos que se consideran convencionalmente atractivos, puede generar una gran impresión en quienes están acostumbrados a ver a una persona con mejillas rellenas. Los fans de Liam Payne son unos de los que no han dado crédito a este cambio tan drástico en su estructura facial.
Muchos especialistas en belleza han señalado que no todos los pacientes pueden llegar a hacerse esta operación y obtener un resultado satisfactorio, ya que depende mucho de la estructura ósea de cada uno y del volúmen de tejido blando que se tenga en las mejillas. Si se elimina gran parte de la grasa de esta zona, puede suceder un envejecimiento prematuro del rostro. Algunos de los seguidores de Liam Payne, por ejemplo, han señalado que su ídolo luce mucho más mayor después de este retoque. Sea como sea, la opinión que realmente importa es la del cantante: si se siente satisfecho con este cambio, habrá que alegrarse por él y esperar que tenga las mínimas consecuencias negativas a largo plazo. ¡La belleza es cuestión de puntos de vista!