BECARIOS SÍ ¿EH?

Cómo un becario salvó la industria de los videojuegos tal y como la conocemos

Los momentos en los que cambia la historia son completamente inesperados. No se puede prever cuándo una acción vira el rumbo hacia la realidad en la que vivimos. Este es uno de esos instantes en los que la historia de los videojuegos se transformó hacia lo que conocemos ahora.

Personas jugando a videojuegos.Freepik

Cada decisión que tomas puede llevarte por un sendero inesperado lleno de baches, pero que finaliza en un momento definitorio que transforma todo lo que creías conocer. Bueno, igual nos estamos flipando, pero la cuestión es que nunca sabes cuándo algo que haces es relevante, y mucho menos cuándo algo que haces acaba por ayudar a que toda una industria tenga el aspecto que tiene hoy en día. Es el caso de un becario de Valve que, a mediados de los 2000, ayudó a la empresa de tal modo que Steam se convirtió en la bestia que es ahora.

Vamos por partes. Half-Life es un videojuego FPS desarrollado por Valve que se publicó para PC en el año 1998. Para tal fin, se aliaron con Sierra Entertainment en un acuerdo que les vinculaba por dos juegos para la distribución. Además, otro factor a tener en cuenta es que Sierra era subsidiaria de Vivendi, lo que complicó las cosas cuando, hacia el año 2000, en Valve decidieron que el acuerdo original no les gustaba. Bajo los términos acordados, Vivendi era el dueño de Half-Life, Team Fortress y otras IP de la compañía. Valve quería desarrollar Half-Life 2, pero también deseaban experimentar con la distribución online.

¿Cuál era el problema? Sierra (y por ende Vivendi) tenían los derechos globales de distribución, pero solo para videojuegos en formato físico para tiendas. Vivendi estaba licenciando Counter Strike (otro juego del acuerdo) a cibercafés. Valve les dijo que no pasaba nada mientras admitieran que eso estaba fuera del contrato que tenían y que se conformaban con que Vivendi cubriera ciertos gastos judiciales. Se negaron, así que Valve lo llevó a juicio. Vivendi contraatacó con varias contrademandas destinadas a hundir a Valve.

El proceso duró años y, en un momento dado, Valve pidió información sobre lo que Vivendi había estado haciendo en cibercafés de Corea. Vivendi respondió enviando documentos en coreano a toneladas, incluyendo emails y otras facturas que no tenían nada que ver con la demanda. La idea era aplastar por exceso. No contaban con que, dentro de Valve, había un becario cuyo idioma materno era el coreano. El interno repasó los documentos y encontró un mail entre dos vicepresidentes con la frase "He borrado los documentos de Valve tal y como pediste". La aguja en el pajar, vaya.

Gracias a ello, el juicio quedó sentenciado, dando la razón a Valve. La compañía recuperó sus fondos, pudo lanzar Half-Life 2 y construir Steam. A día de hoy, Steam es la principal tienda online de videojuegos, esencial en cualquiera PC, el núcleo de la Steam Deck y básicamente sinónimo de gaming. Una bestia enorme que no hubiera existido si un becario no hubiera mirado unos documentos en coreano.